Mercedes Velan acudía a la Basílica del Sagrado de Jesús en Buenos Aires con la certeza de que iba a asistir a la boda de un amigo, Walter. Pero no, la novia era ella. Su pareja, Gustavo Ortiz, con el que lleva más de 30 años y tiene tres hijos, estaba dispuesto a darle el sorpresón de su vida.
Una idea que se ha hecho famosa en las redes y que deja ver que, en la actualidad, cada vez son más los que buscan salirse de lo común. Tanto en la pedida de mano como en la celebración. ¿Siempre ha sido así? Antes de conocer el resultado de la idea de Gustavo, puedes descubrir cómo eran las bodas el año en qué naciste gracias a nuestra galería.
La pareja ya se había casado por lo civil, pero Gustavo quería volver a celebrar su amor. Conseguir la iglesia no fue tarea fácil, ya que la mayoría de ellas ponían como requisito el consentimiento de la novia. Después de varios años, por fin encontró a Sebastián García, un cura al que le gustó la idea y accedió a casarles.
Otro de los hándicaps fue el vestido de la novia. Al parecer, Mercedes tenía pensado ponerse un traje oscuro y sus amigas tuvieron que interceder para que utilizara un vestido largo y claro. Lo que vino después puede resumirse en las siguientes palabras: emoción, lágrimas de alegría y mucho, mucho, amor. ¡Puedes verlo en el vídeo!
Y tú, ¿qué harías si te dieran una sorpresa así?
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