2015 ha sido un año lleno de amor. Este año han surgido muchos nuevos lazos que pocos sospechaban. Muchos solteros de oro han desaparecido de la lista. Pero no hay que apurarse porque este año también ha habido muchas rupturas.
Cupido se ha divertido lanzando flechas a diestro y siniestro y ha confundido demasiado al personal. Tanto, que este año ha habido muchas rupturas que ha reavivado el papel couché y ha hecho frotarse las manos a más de uno. Y a más de una.
Por mucho que hayamos dicho adiós a la soltería de Cristina Pedroche o que la fortuna de Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa ya está a buen recaudo, hay otras joyas de la corona que vuelven a estar en el mercado. Úrsula Corberó y Andrés Velencoso formaban una de las parejas más envidiadas del panorama nacional, pero se les rompió el amor de tanto usarlo.
Por el camino hemos visto como los corazones de Antonio Banderas y Melanie Griffith se deshizo en añicos. Todo lo que había construido aquella pareja se olvidó en cuestión de días. Hasta los guapos de Cristiano Ronal e Irina Shayk no han soportado mirarse al espejo y ver tanta perfección.
El mundo del corazón más castizo también ha visto muchas idas y venidas. Belén Esteban perdió a su novio después de ganas GH VIP. Después lo recuperó. Lo mismo pasó con la hija de Isabel Pantoja y Alejandro. Pero a estas historias de quita y pon ya estamos más acostumbrados.
La política también ha sufrido lo suyo. Y es que este intenso año electoral ha hecho mucho daño a los corazones. Pablo Iglesias y Tania Sánchez eran aliados en casa y opuestos en la calle. Finalmente, se terminó su historia de amor y lo anunciaron en Facebook. Ahora, ella está en la lista del partido morado.
LETTER
Otros no parecen haber terminado haciendo las paces después de decirse adiós. Sonia Ferrer decidió terminar su relación con Álvaro Muñoz Escassi y a él le apareció una hija desconocida. Toni Acosta y Jacobo Martos rompieron después de 13 años juntos. Ni Halle Berry y Olivier Martinez se han librado de la ira de Cupido. Todo el mundo tiene un mal día.