La talentosa actriz española Úrsula Corberó, conocida por su papel en la exitosa serie "La Casa de Papel", se sentó recientemente en el estudio de LaScript, el popular podcast de María Guerra. Lo que comenzó como una conversación sobre su nueva serie "El cuerpo en llamas" pronto se transformó en un relato conmovedor sobre su infancia marcada por una enfermedad y el acoso escolar que sufrió debido a su aspecto físico.
A pesar de su inmenso éxito en la actualidad, con más de 21 millones de seguidores en Instagram, Úrsula Corberó compartió que su niñez no fue fácil. Uno de los factores que contribuyó a su dificultad en la escuela fue una enfermedad que le diagnosticaron cuando era niña: un retraso óseo de cinco años. Aunque nunca había hablado públicamente sobre esto, Úrsula decidió abrir su corazón y compartir su experiencia.
"Era muy pequeña. Tengo un retraso óseo de cinco años, no lo he dicho nunca porque suena un poco mal", confesó la actriz durante la entrevista. Esta condición hizo que, durante su adolescencia, se sintiera diferente de sus compañeras. Mientras que sus amigas experimentaban los cambios propios de la pubertad, como el crecimiento y el desarrollo físico, Úrsula se encontraba en una etapa diferente de su desarrollo. "A mí me bajó mi primera menstruación con 17 años, me empezaron a crecer los primeros pelillos del sobaco con 17 años. Eso hizo que con 15 mis amigas llevasen la XS de Bershka y yo estaba con la talla 14 de Zara Kids", explicó.
Lamentablemente, esta diferencia física llevó al acoso escolar, y Úrsula compartió que fue víctima de bullying debido a su aspecto y tamaño. Sus compañeros no fueron comprensivos con su situación y se burlaron de ella. Incluso su nombre, Úrsula, fue objeto de burlas crueles durante esa época. Corberó recordó cómo la llamaban "Úrsula, esdrújula" o "Úrsula, bruja". A pesar de la dureza de aquellos momentos, hoy en día, la actriz ha aprendido a aceptar su nombre y se siente feliz con él.
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La enfermedad y el acoso que Úrsula Corberó experimentó en su infancia y adolescencia marcaron no solo su cuerpo, sino también su personalidad. A medida que enfrentaba desafíos constantes, desarrolló una fuerte personalidad que, con el tiempo, se convirtió en una fuente de orgullo. Como ella misma lo expresó, "Ahora me siento bastante orgullosa. Úrsula es lo más, pero cuando tenía 12 años...".
El término "retraso óseo" se refiere a un retraso en el desarrollo óseo de un niño, lo que significa que alcanzará su altura adulta más tarde que la mayoría de sus compañeros. Es importante destacar que esto no significa necesariamente que será más bajo que el resto en la edad adulta, sino que llegará a su altura definitiva en un momento posterior. Este diagnóstico médico, aunque desafiante en la niñez, no ha impedido que Úrsula Corberó se convierta en una de las actrices más influyentes y queridas de la industria del entretenimiento.