Las ceremonias de clausura de unos Juegos Olímpicos se caracterizan por tener siempre un alto grado de espectacularidad. Además, en cada una de ellas se escenifica el relevo entre la sede que ha acogido los Juegos y la que lo hará en la siguiente edición. Las Olimpiadas de 2028 tendrán lugar en Los Angeles, y por tanto, tocaba recrear este relevo dando paso a alguna personalidad que se identificara fuertemente con esta ciudad. ¿Y quien mejor para hacerlo que una celebridad de Hollywood?
La espectacular entrada de Tom Cruise
Celebridad de Hollywood sumado a espectacularidad. Solo un nombre encajaba para resolver esa ecuación, y ese era el de Tom Cruise. El actor que ha protagonizado la saga Misión Imposible era la elección más obvia, y ya desde días atrás se especulaba con la posibilidad de que tomara parte en la ceremonia de clausura, al haber sido visto en la capital francesa, como efectivamente así fue.
La intervención de Cruise no decepcionó, ya que hizo su entrada desde una de las zonas altas del estadio, lanzándose en tirolina. En ese momento no pudimos sustraernos al recuerdo del icónico salto que el actor nos regaló en la primera entrega de la saga, en que se descolgaba desde el techo para quedar a unos centímetros del suelo.
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El traslado de la bandera olímpica
Una vez ya en el suelo del estadio, Cruise corrió hacia el lugar donde se encontraba la bandera olímpica, saludando en su trayecto a decenas de atletas en su camino que aprovecharon para hacerse selfies con el actor, quien a sus 62 años demostró seguir en una espléndida forma física. La tomó de mano de la ateleta Simone Biles, y abandonó el estadio en una moto de gran cilindrada.
Lo que pudo verse a continuación en las pantallas fue como Tom Cruise circulaba a gran velocidad con la bandera por las calles de la capital francesa, se subía en un avión y volaba rumbo a Los Angeles, para dar allí el relevo entregándola a otros atletas que culminaron el recorrido en un concierto de Red Hot Chilli Peppers - cuya música sonaba de fondo en todo momento- en las playas de esta ciudad.
Evidentemente toda esta parte estaba grabada previamente, pero la aparición de Tom Cruise en el estadio supuso un broche de oro a unos Juegos que no han estado exentos de polémica. Además, según apuntan algunas fuentes fue el propio actor quien tomó la iniciativa de proponer al comité Olimpico su intervención para llevar a cabo esta espectacular transición entre París 2024 y Los Angeles 2028.