Los hay que sufren los derrapes de lujosos deportivos mientras sacan a pasear al perro o que se pasan noches enteras sin poder pegar ojo porque su vecino ha decidido hacer una fiesta sin reparar en el volumen de la música. Si ya de por si la convivencia es complicada, cuando en la casa de enfrente tienes a un famoso un tanto peculiar, prepárate porque no podrás decir eso de 'hogar dulce hogar'. Estos son algunos de los vecinos menos adorables.
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Imagina salir a dar un paseo en bici y tener que sortear cientos de coches de alta gama porque tu vecino famoso ha decidido hacer una reunión de amigos con sus compañeros de equipo. Pues eso no es nada. Aquí van algunos de los atropellos que han sufrido los vecinos de estas celebs. Los vecinos de Rihanna, por ejemplo, están bastante cansados de ver cómo los chóferes de la cantante aparcan en la entrada de sus residencias y les destrozan el césped.
Chris Brown, siempre ajeno a la polémica, organiza carreras de perros en su casa y para no perder las buenas costumbres, es un asiduo de apropiarse de las plazas de aparcamiento para discapacitados... Siendo sinceras, de Chris ya nos esperamos cualquier cosa. Otro que también es una auténtica delicia como vecino es Justin Bieber, que lo mismo monta una longeva fiesta que se pone a tirar huevos en las fachadas de sus vecinos. Kirsten Bell y su marido declararon en una ocasión que ser vecinos de Bieber era como vivir en Líbano.
Pero no todo es consecuencia de la mala educación, por ejemplo, el superproductor de cine Jerry Bruckheimer decidió plantar unos "arbolitos" en su patio trasero, y cubrió todas las vistas de sus vecinos, privándoles además del sol. Como consecuencia, alguno de ellos vio descender notablemente la productividad de sus cultivos. Otro que tampoco es muy buen vecino es Sean Conery, que según algunos de los propietarios de su comunidad, se pasaba el día gritando, y llevaba a cabo obras de baja calidad. Por si fuera poco, algunos se quejaron de que no pagaba el mantenimiento del edificio... Desde luego Sean que un gentleman 007 no actuaría de ese modo. Varias revistas han asegurado que Paulina Rubio tampoco era muy partidaria de pagar las cuotas de la comunidad de su residencia de Miami.
También es una práctica muy habitual en el mundo celeb lo de montarse un zoo en casa. Hulk Hogan tuvo que decirle adiós al suyo, cargado de hurones, gallinas o conejos, como consecuencia de las quejas de sus vecinos, que alegaron que era imposible vivir con ese hedor. Estamos seguras de que el cerdo vietnamita de George Clooney era al lado de la granja de Hogan, una auténtica maravilla.
Por último pero no por ello menos importante, Madonna. La reina del pop se montó un completo gimnasio en su ático de Manhatan, y su vecino la denunció por el ruido de sus entrenamientos. Todo el mundo sabe que un cuerpo tan fibroso como el de Madonna necesita muchas horas de gimnasio.
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