A Cayetana Guillén Cuervo le sonríe la vida profesional. Si durante todo el año presenta dos programas en TVE, ahora también tiene una serie de televisión que le ha acercado mucho más a los espectadores. La actriz repite como una de las protagonistas de El ministerio del tiempo.
Su papel en esta serie y todo el fenómeno que hay a su alrededor ha provocado que se creasen numerosos club de fans en torno a la actriz. Son los llamados "cayetaners". Ella todavía no se lo cree cuando se habla de ellos.
Aunque su vida profesional va viento en popa, es una felicidad algo ácida por el momento personal por el que pasa. Su hermano Fernando Guillén Cuervo acaba de separarse de la también actriz Ana Milán. Su madre Gemma Cuervo pasa por un momento de salud delicado. Esta y otras cuestiones las hablamos con la actriz.
¿Cómo afronta esta segunda temporada de El Ministerio del Tiempo?
Con mucha ilusión. Irene es un personaje que sólo me ha dado cosas buenas. Yo amo a Irene Larra, imagínate. Totalmente. La he revivido con mucha ilusión y con muchas cosas que le pasan al personaje. Le pasa de todo.
De todos los viajes en el tiempo o los personajes históricos que veremos esta entrega, ¿cuál le ha hecho más gracia?
Es que se viven muchas cosas en esta serie: sale Napoleón, Lope de Vega, Cervantes, Houdini, Spinola... Está muy chulo.
© Gtres
Con esta serie también se ha reconciliado con el público, que la veía quizá más fría. Ahora cuenta hasta con 'cayetaners'.
Sí, es una pasada. El fenómeno fan es siempre más de las tías hacia los tíos. Es un fenómeno más de Rodolfo [Sancho], de Hugo [Silva.... Pero a una actriz es una cosa rara que pase. Esto me emociona mucho y estoy súper agradecida. Lo que te dan es todo bueno y mucho cariño.
¿Se considera una diva homosexual?
Un icono lésbico. Pero no me considero yo, me consideran. Es una maravilla cómo se ha tratado el tema en la serie. En Irene no se pone el foco concreto. Simplemente, el personaje tiene esa orientación sexual, como puede tener otra, y ni se juzga ni se dan explicaciones.
¿A usted le tiran los tejos las mujeres?
A mí las mujeres siempre me han tirado los tejos. No a raíz de Irene. De siempre. Siempre, en mi vida, he gustado a tías.
¿Por qué cree?
Porque debo de ser un poco tío (se ríe). No sé... Será por la voz grave... ¡Yo qué sé! ¡No tengo ni idea! Pero siempre he tenido éxito entre las mujeres y lo cual me encanta. Estoy muy cerca del mundo LGTB, tengo grandísimos amigos, de los mejores, y el que este personaje fuera lesbiana era un punto a su favor para que me apeteciera más interpretar.
Su personaje en esta serie ha calado mucho en el público, pero, ¿y en casa? ¿Cómo lo ha vivido su hijo, Leo?
Mi hijo, de 9 años, ve la serie y le encanta. Sus amigos también la ven. Y busca en Google quién es Hitler, Spinola...¿Cómo vive esta nueva etapa de su madre? ¿Que sea un icono lésbico? (se ríe).Bueno, le hacía una pregunta más general. En casa no lo vive de ninguna manera. Sus amigos, a lo mejor, sí que le hacen algún comentario tipo: "Tu madre, ¡eh!". Él contesta como "qué pasa". Lo defiende como algo normal.
¿Le tira lo de ser actor?
Por ahora no le doy opción. Él tiene que jugar y que estudiar.
¿Cómo se encuentra su madre?
Ahí va... Está bien.
¿Y su hermano Fernando?
También regulín. Es que no es fácil... Qué quieres que te diga.
Ha adelgazado mucho.
Está muy delgado, sí. Es por la ruptura, porque no es fácil y lo pasa mal... Pero de salud no le pasa nada. Ahora está con una serie, un proyecto en el que lleva 12 años intentándolo para sacarla adelante y ahora se ha hecho realidad.
¿Qué proyectos tiene usted ahora?
Estoy con los dos programas y ahora, acabar con la serie... Después tengo que pensar un poco que ver, porque ha sido un poco 'heavy'. Se me montó todo...
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