Nuestros sueños dicen mucho sobre nuestros deseos, incluso los más ocultos. Verdaderos reveladores emocionales, algunos son más notables que otros y se basan en imágenes posibles de interpretar. La noción de dinero forma parte de ello y tiene significados diferentes, según el contexto. Aquí te los explicamos.
La simbología del dinero
Los psicoanalistas se ponen de acuerdo sobre la interpretación de los sueños, y lo hacen también con ciertos temas de la vida, particularmente significativos. El dinero tiene una de las simbologías más fuertes. Signo de potencia y fuerza en nuestra sociedad moderna, sigue siendo un medio ineludible para ejercer poder sobre los demás (tanto en los negocios como en el amor). El dinero también puede representar una cierta forma de seguridad frente al porvenir.
Y por supuesto, el dinero puede ser también sinónimo de placer y división. Al contrario, a veces el dinero puede volverse destructor, llevando a la traición, la búsqueda constante del beneficio y una forma de dependencia para compensar un vacío afectivo. En los sueños, el dinero representa una noción de valor que puede relacionarse con la persona que sueña o con las personas y acontecimientos con los que ésta sueña. Es precisamente este valor personal lo que constituye una personalidad, estable o no, alegre o no.
Las diferentes interpretaciones
En los sueños, el dinero tiene varios significados según el contexto. Entre los más corrientes:
- El dinero en forma de metal: puede ser símbolo de pureza. Soñar con este metal en una forma distinta a las monedas, por ejemplo joyas, simboliza una necesidad de ir a lo esencial privilegiando lo que verdaderamente tiene valor. Esto puede pasar en situaciones diversas o relaciones (amistosas o amorosas).
- Regalar dinero: este acto es lejos de ser anodino. Si la soñadora da generosamente dinero a alguien, es porque le concede o debería concederle más interés en la vida cotidiana.
Dar el dinero en el marco de una compra puede significar que la soñadora experimenta cierta necesidad que debe satisfacer para estar mejor consigo misma. En cambio, si las compras son demasiado repetidas, significa que la soñadora es demasiado gastosa y materialista. En el caso de la compra del bienes preciosos (casa, coche), significa que el valor personal de la soñadora se enriquece y muestra la necesidad de afirmar su personalidad y lo que quiere. Por último, en el marco de una donación al Estado (impuestos, multas), muestra que la soñadora desea aportar su contribución al buen funcionamiento de la sociedad en la que ella evoluciona y rechaza el individualismo.
- Recibir dinero: si viene de un desconocido, prueba que la soñadora debe aumentar su valor personal y autoestima. Si conoce a la persona que da el dinero, significa que dicha persona la aprecia más de lo que se imagina.
Si la persona que sueña gana dinero, debe saber que tiene verdaderas aptitudes que debe explotar más. Y si se trata de mucho dinero, puede significar que podría necesitarlo para recuperar la confianza en ella misma y frente a los demás.
Hay quien sueña también que encuentra dinero de casualidad. ¿Quizás por fin va a sonreírle la suerte?
Y si recupera una cantidad que se le debía, no cabe duda de que quiere decir que su situación va a estabilizarse.
- Perder dinero: atención, este tipo de sueño nunca es de buen augurio. Puede significar que la soñadora pierde su tiempo y energía en diferentes ámbitos (en el trabajo, en el amor, en el plano físico). Esta pérdida debe hacerle cuestionarse si debe retomar el control de su vida.
- El dinero en forma de tesoro: si se trata de monedas, oro o joyas significa ¡que le espera algo bueno a la vuelta de la esquina! Se trata también de algo nuevo en la vida de la soñadora y, por lo tanto, de un desarrollo personal. Un proyecto que por fin va a ver la luz, una salud mejor, un encuentro inesperado… Uno o varios acontecimientos que va a provocar gracias a una recuperación de energía y iniciativa.
LETTER
- El dinero en forma de herencia: puede significar que la persona que lega sus bienes también transmite algunas de sus cualidades humanas (ambición, altruismo, coraje), que van a representar una fuerza moral suplementaria para la soñadora.