Probablemente, la tarta Sacher es el pastel de chocolate más famoso del mundo. Creada hace casi ya dos siglos, ha sido una de las tartas más reproducidas. Aunque su receta original es secreta, muchos se han lanzado a crear sus versiones, dando lugar a resultados más o menos parecidos.
¿Sus características? Dos capas de bizcocho de chocolate con un relleno de mermelada de albaricoque y una cubierta de chocolate negro. Aunque la verdadera tarta Sacher lleva confitura de albaricoque, es algunas de las muchísimas versiones, puedes encontrarla con mermelada de frambuesa o de fresa.
Sigue leyendo si quieres descubrir su historia, dónde probar la original y una receta muy similar con la que podrás reproducirla sin salir de casa. ¡Apunta!
Historia de la tarta Sacher
La tarta Sacher original fue creada por un aprendiz de pastelero, Franz Sacher, en 1832. Por aquel entonces solo tenía 16 años y tuvo que encargarse de una petición muy especial casi por casualidad: el príncipe del Imperio Austriaco, Klemens von Matternich, quería un postre para sorprender a sus invitados.
Como imaginarás, el encargo no se lo hizo al jovencísimo Sacher, sino al pastelero titular de la Casa Real Austriaca. Pero, afortunadamente para los amantes de esta tarta, el pastelero titular estaba indispuesto y tuvo que dejar la responsabilidad en manos de su aprendiz. ¡Benditos contratiempos!
Para la ocasión, decidió poner en práctica todo lo que había aprendido y crear una tarta sin demasiadas complicaciones. ¿El resultado? Un éxito rotundo que supuso el inicio de una gran carrera como pastelero. Tanto que más de 180 años después, sigue siendo la tarta de chocolate más famosa y su receta secreta, la más buscada.
¿Dónde probar la tarta Sacher original?
Como ya te adelantábamos, la receta de la tarta Sacher es secreta. Desde el Hotel Sacher de Viena no han querido revelar su elaboración y han guardado el secreto durante casi dos siglos. Por eso, aunque existen muchas versiones, el único lugar en el que podrás probar la verdadera tarta Sancher, es en el Café Sacher.
Si visitas Viena y eres amante de la repostería, es una visita obligada. Eso sí, no serás el único y puede que te toque esperar bastante hasta que consigas sitio, pero merecerá la pena. El entorno del café del Hotel Sacher, abierto por el hijo de Franz, Eduard Sacher, es de una elegancia exquisita y sus dulces aún más.
La tarta Sacher original tiene una capa fina de mermelada entre ambas partes del bizcocho y se sirve con crema chantilly o nata. Además, como puedes ver en la foto, la tarta también incluye un sello que verifica su originalidad. Podrás acompañarla con un delicioso café vienés con leche espumada.
Receta de la tarta Sacher versionada
Aunque pueda parecer una receta complicada, lo cierto es que si sigues los pasos cuidadosamente, puedes conseguir un gran resultado. Saca tus armas culinarias y dispónte a crear una deliciosa tarta Sacher que no tenga nada (o casi nada) que envidiar a la original.
Ingredientes para el bizcocho de la tarta Sacher:
- 8 huevos
- 180 g de harina
- 180 g de chocolate negro 72% cacao
- 150 g de azúcar
- 180 g de mantequilla
- 180 g de mermelada de albaricoque
- 6 g de levadura
Ingredientes para la cobertura de la tarta Sacher:
- 300 g de chocolate negro 72% cacao
- 200 g de mantequilla
Preparación de la tarta Sacher:
1. Fundir el chocolate del bizcocho en un bol y añadir un poco de mantequilla.
2. Tamizar la harina y la levadura.
3. Batir las yemas de los huevos con la mitad de la azúcar, preferiblemente con un batidor eléctrico.
4. Montar las claras de los huevos con la otra mitad del azúcar en un bol diferente.
5. Mezclar las claras con las yemas, añadir la harina tamizada y el chocolate fundido.
6. Echar la mezcla en un molde circular.
7. Precalentar el horno a 180 grados y hornear durante unos 40 minutos.
8. Sacar del horno, desmoldar y dejar enfriar.
9. Preparar la cobertura o glaseado: fundir el chocolate en el microondas, añadir la mantequilla y mezclar bien. Reservar.
10. Partir el bizcocho por la mitad cuando esté frío.
11. Poner una capa fina de mermelada de albaricoque sobre la parte inferior del bizcocho.
12. Colocar la parte superior encima.
13. Poner el bizcocho sobre una rejilla y un recipiente.
14. Calentar un poco la cobertura y bañar el bizcocho con ella.
15. Alisar con una espátula si es necesario.
16. Servir con nata montada al lado como la original.
¡Y listo! Ya tienes una deliciosa tarta Sacher para deleitarte y sorprender a los que tengan la suerte de probarla.
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