Es importante marcar las pautas de una buena alimentación desde los primeros meses de vida de los niños, pues las bases que marquemos serán claves en su desarrollo. Comer de manera equilibrada, variada y saludable es esencial, pero para ello es recomendable conocer cuáles son las necesidades que tienen los bebés. Uno de los nutrientes esenciales para el desarrollo de la estructura ósea y muscular de los niños son las proteínas, que se encuentran presentes en la leche materna, la mejor fuente de este y otros nutrientes esenciales para nuestro bebé. Pero, aunque las proteínas son muy importantes, su consumo debe ser controlado. A continuación desmontamos algunos mitos sobre ellas.
Cuantas más proteínas, mejor
Error. Para empezar, si el bebé aún se encuentra en periodo de lactancia exclusiva, no necesitará un aporte de proteínas más allá del que le ofrece la leche materna, pues este es su único alimento. Además, hay que tener en cuenta que sus órganos aún no son lo suficientemente maduros, por lo que no están preparados para procesar una alta cantidad de este nutriente.
Los lactantes no necesitan limitar las tomas
Como ya hemos comentado, la leche materna es el alimento exclusivo de los bebés hasta los seis meses de vida. Y como tal, se debe proporcionar a demanda, un concepto que debemos tener muy claro. En la leche materna se encuentran, además de las proteínas, todos los nutrientes indispensables para su crecimiento. No debemos dudar sobre si nuestro bebé realiza demasiadas tomas al día o pensar en el aporte calórico, pues la propia leche materna se adapta con el paso de los meses a las necesidades del niño.
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Las necesidades nutricionales de un niño no son iguales que las nuestras
La cantidad de nutrientes esenciales que los niños necesitan varía mucho de la que necesita un adulto. Como curiosidad, y para que lo tengas en cuenta, te damos algunos ejemplos más concretos: un niño de un año necesita, por kilo de peso, 2,3 veces más vitamina A que un adulto, 6,3 veces más de hierro y 1,3 veces más de vitamina D.
¿Cuántas proteínas necesita un bebé al día?
La Asociación Española de Pediatría informa de que el cálculo de la ingesta proteica del lactante se sitúa en 2,04 gramos diarios durante los tres primeros meses y 1,73 gramos al día de los tres a los seis meses. A partir de los 4-6 meses, según las indicaciones del pediatra, los bebés pueden comenzar a tomar otros alimentos más allá de la leche, lo que supone una buena alternativa para introducir las proteínas de una manera diferente: a través del puré de verdura con carne o pescado, por ejemplo.
Fórmulas infantiles, una alternativa perfectamente válida
¿Y qué ocurre si no queremos o no podemos dar el pecho a nuestro bebé? Aunque hemos comentado que en la leche materna reside la cantidad idónea de nutrientes, no todos los bebés tienen la posibilidad de tomarla. Y no pasa nada, pues hoy en día contamos con fórmulas de inicio cuya composición se adapta a las necesidades de los niños. Igualmente, existen fórmulas infantiles de continuación que aseguran un aporte de proteínas de alta calidad.
Recuerda que si tienes cualquier duda a acerca de la alimentación de tu bebé siempre puedes acudir a tu pediatra para que te asesore correctamente.
NOTA IMPORTANTE: La OMS recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses y debería continuarse durante el mayor tiempo posible. Dado que los bebés crecen a ritmos diferentes, los profesionales de la salud deben aconsejar a los padres el momento apropiado para la introducción de los nuevos alimentos.
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