Marisa Fuertes nos presenta su espacio para vivir y trabajar
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La decoradora Marisa Fuertes nos presenta su Espacio para Vivir y Trabajar, con dos estancias diferenciadas albergadas en 55 metros cuadrados, con el objetivo de conseguir un espacio que sirva para trabajar pero que también pueda ser habitable.
¿Cómo conseguimos esa separación? Utilizando una librería en uno de los lados y una embocadura en el otro. El espacio está orientado a un profesionales que quieran una vivienda que puedan utilizar también para su desempeño laboral, por ejemplo diseñadores, arquitectos, abogados o ingenieros.
Marisa Fuentes utiliza mobiliario del siglo XIX y del XX, de aspecto elegante, actual y atemporal, mezclando varios estilos e incluso utilizando materiales reciclados.
Para la decoradora, la tendencia actual es mezclar el pasado con el presente, lo moderno con lo clásico, reutilizar mobiliario para crear nuevos espacios y aprovechar las piezas que ya tenemos. Esto evolucionará hacia espacios con líneas puras, frescas, tratando de integrar las piezas que tienen “algo que decir dentro de nuestra vida”.
Lo primero en su proceso de diseño fue estudiar bien el edificio, que presentaba alguna que otra complicación por el reducido espacio del que disponía. Su pieza preferida es el caballito de feria del siglo XIX. “Lo rescatamos de un contenedor de basura en el sur de Francia”, explica Marisa.
A la hora de satisfacer al cliente, Marisa Fuertes explica que lo que más demandan es “que sigas su propio estilo”, aunque al final hay que buscar el entendimiento entre el gusto del profesional y el del cliente.