De todas las técnicas de blanqueamiento que existen, la que tiene unos resultados más visibles es la realizada en una clínica especializada. Fotoactivación, tratamiento interno o a través del blanqueamiento mixto. Despeja tus dudas sobre en qué consiste el blanqueamiento dental en clínica y descubre cuál es el que mejor puede encajar contigo.
© iStock
Fotoactivación
El blanqueamiento por fotoactivación solo se puede aplicar en una clínica y por un especialista. A través de la aplicación de un gel de peróxido de hidrógeno, el oxígeno se filtra hasta llegar al esmalte dental y blanquearlo. La efectividad de este gel se ve aumentada por el uso de la luz LED.
Este blanqueamiento permite adecuarse a las necesidades de cada paciente, factores como el color de sus piezas dentales o el color de su piel pueden ser decisivos a la hora de determinar qué nivel de blanco es el más recomendable en cada caso.
- En primer lugar, el odontólogo cubre las partes blandas de la boca para evitar que puedan ser dañadas durante el proceso. A continuación se aplica el gel de peróxido de hidrógeno cuyas propiedades son fotoactivables, es decir, se ven aumentadas con la ayuda de la luz, en este caso por la luz fría del LED. Este gel es un activo blanqueante que se aplica de forma homogénea en todas las piezas dentales para que todos los dientes tengan el mismo tono.
- Este tipo de tratamientos blanqueantes ofrecen resultados ya en la primera sesión, llegando a blanquear entre 4 y 10 tonos del esmalte (el resultado depende de cada paciente). Otro de sus beneficios es que resulta indoloro. Sí se puede apreciar una mayor sensibilidad dental durante las 72 horas posteriores al tratamiento debido a que el poro del esmalte está abierto, por ello se recomienda evitar alimentos que contengan colorantes o azúcares en estas primeras horas.
Los resultados se pueden potenciar aún más desde casa, con el uso de dentífricos, colutorios o cepillos blanqueantes que ayuden a que además de protegidos, nuestros dientes continúen con su tratamiento blanqueante.
Sistema mixto
Es uno de los más utilizados ya que combina todos los beneficios de un blanqueamiento realizado en una clínica especializada con la comodidad de un tratamiento realizado desde casa. Después de haber sometido a nuestra dentadura a un tratamiento con peróxido de hidrógeno y luz LED, el blanqueamiento continúa en casa.
En la propia clínica te darán una férula hecha con el molde de tus dientes para que la lleves mientras estés en casa. Aplicando el gel de peróxido de hidrógeno sobre la férula, solo tendrás que colocarla sobre tus dientes y dejarla actuar el tiempo que tu médico odontólogo te haya indicado. En este tipo de blanqueamiento mixto es muy importante que un especialista lleve un seguimiento rutinario de tus dientes y de la evolución de su blanqueamiento.
Blanqueamiento interno
Se suele utilizar para blanquear piezas aisladas, es decir, cuando algunos dientes no tienen el mismo color que el resto. Esta técnica es algo más complicada que las anteriores. El odontólogo perfora la pieza dental en cuestión para luego rellenarla con un blanqueador y terminar por sellarla. De este modo el diente queda blanqueado desde dentro. Este tipo de técnicas se suele utilizar con dientes desvitalizados, consecuencia de un golpe, una endodoncia, etc.
LETTER
Ahora que conoces todas las técnicas de blanqueamiento en clínica, ya puedes elegir cuál es la que más le conviene a tu dentadura. Consulta con tu médico y no te olvides de seguir cuidando tus dientes a diario desde casa. Presume de una sonrisa blanca y sana.
