Las sesiones de radiofrecuencia, que se pueden aplicar tanto a la cara como al cuerpo, son absolutamente indoloras. Duran un promedio de entre 30 y 60 minutos, durante los cuales el paciente siente una sensación calor intenso, más aún cuando el dispositivo trabaja sobre las zonas más ricas en tejido adiposo.
Es una de las técnicas de medicina estética más demandadas por su efectividad en el tratamiento de la celulitis y porque, además, es un procedimiento no invasivo. El RFID utiliza radiaciones electromagnéticas que provocan que las diferentes capas de la piel del área donde se aplica el dispositivo se calienten, consiguiendo llegar a las capas más profundas. Al mismo tiempo, y por eso es tan segura, protege la epidermis. Esta técnica no solo trata la acumulación de grasa y líquidos sino que, por otro lado, combate las cçelulas envejecidas y estimula la producción de colágeno y nuevas células.
En el siguiente vídeo te explicamos como funciona el tratamiento de radiofrecuencia corporal
En la práctica, la radiofrecuencia estética funciona gracias al choque térmico que genera en las capas de la piel. Este procedimiento estimula, como hemos dicho, la producción colágeno, la proteína más abundante del cuerpo humano que juega un papel fundamental en el soporte y estructura de los tejidos conectivos y los órganos, y, además, estimula el proceso de regeneración.
En definitiva, provoca que el cuerpo y los tejidos se relajen. Se recomienda, sien embargo, que el tratamiento RFID se combien con ejercicio físico y una dieta saludable. Esto garantiza unos resultados óptimos y duraderos.
¿En qué casos se debe recurrir el tratamiento RFID?
El tratamiento de radiofrecuencia está indicado para los siguientes casos:
- Corregir las arrugas
- Restaurar y recuperar el tono de la piel
- Tratar y reducir los depósitos de grasa localizados
- Estimular la circulación linfática
- Tratar y reducir la celulitis
- Eliminar la inchazón y flacidez del abdómen después dle embarazo
Las contraindicaciones de las radiofrecuencias son mínimas y son muy concretos los casos en que este tratamiento es no recomendado. Aun así, es bueno saber en qué casos puede ser perjudicial para reflexionar sobre la conveniencia de someterse o no a esta técnica. Así, no deberían someterse al tratamiento RFID:
- Mujeres embarazadas o lactantes
- Aquellos que sufren de enfermedades del corazón
- Quienes padezcan dermatitis
- Quienes padezcan psoriasis
- Pacientes que sufran enfermedades autoinmunes
Tratamiento RFID: los resultados
Los resultados de la radiofrecuencia son visibles desde las primeras sesiones y, además, son duraderos en el tiempo. Después de someterte a las sesiones que decidas, no se requiere ningún cuidado especial o tratamiento adicional, salvo el uso de cremas hidratantes para mantener la piel suave, calmada y cuidada.
Aun así, es conveniente que si quieres mantenerte en forma, te habitúes a seguir una alimentación sana, equilibrada y rica en fibra y grasas saludables. Por otro lado, es recomendable que incluyas algo de ejercicio en tu rutina diaria. La combinación de estos dos factores evitará la retención de líquido y grasas, activará tu metabolismo y mantendrá tus músculos tonificados.
¿De qué manera se hacen visibles los efectos de la radiofrecuencia?
- Efecto lifting, que se consigue gracias a la estimulación de la producción de colágeno a diferentes niveles de profundidad
- Efecto drenaje, debido a la vascularización obtenida a niveles sostenidos de la radiofrecuencia
- Tonificación de los tejidos
- Mejora de la oxigenación de los tejidos
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