Cada vez más personas se suman al movimiento “eco”, eliminando los alimentos ultraprocesados de sus dietas, practicando deporte al aire libre e incluso en su higiene. Así, esta nueva filosofía de vida llega también a la cosmética. Esta última, hace uso de los mejores aceites esenciales de plantas combinándolo con la tecnología más avanzada, porque ciencia y naturaleza también se dan la mano.
Los productos de belleza de origen natural carecen de sustancias tóxicas que pueden dañar la piel a medio y largo plazo, a la vez que ayuda a protegerla de los agentes externos. Además, dependiendo de cada aceite esencial con el que esté elaborado, los distintos cosméticos naturales conseguirán beneficios que la cosmética convencional no alcance.
Para saber diferenciar un producto natural de uno químico es fundamental reconocer alguno de los distintos sellos de certificación oficial. Desde el instituto de belleza Germaine Goya, en el corazón de la milla de oro madrileña, se encuentra uno de los puntos de venta de esta línea cosmética orgánica, súper ventas en el sector de cremas ecológicas.
No solo es importante la materia prima con la que se elaboran cada uno de estos productos, sino que, además, para poder contar con el sello que garantice su elaboración natural, deben cumplir con la certificación del centro de fabricación, packaging, etiquetado, etc. De tal forma, este tipo de certificación avala que se trate de un producto 100% ecológico.
Beneficios de la cosmética natural
No cabe duda que son muchos los beneficios sobre el medio ambiente de este tipo de productos de belleza pero, ¿qué beneficios poseen la cosmética natural sobre la piel?
En primer lugar, las cremas naturales buscan aportar sustancias lo más similares posibles a la composición bioquímica de la piel. Por tanto, este tipo de productos poseen una mayor afinidad con el rostro y las posibilidades de reacciones químicas ante su aplicación es mucho menor.
Por otro lado, las principales funciones de la cosmética natural es regenerar, cuidar y proteger la piel. Este el caso, de la última apuesta de Germaine Goya, pues su tratamiento facial a partir de cosmética natural promete una mejora evidente sobre la hidratación y regeneración de la piel del rostro, quien además recupera su elasticidad y luminosidad.
El hecho de que el principal ingrediente de la cosmética natural sean aceites esenciales de plantas, hace que su efecto sea mucho más suave y menos agresivo que la cosmética convencional. La piel vuelve a respirar al tiempo que es protegida de la contaminación de la atmósfera y favorece su regeneración de cualquier daño externo.
La sociedad busca un cambio en sus hábitos para hacer de este planeta un lugar mejor. Un cambio que se lleva a cabo desde los gestos más pequeños, empezando por hacer uso del transporte público, cambiar los hábitos de consumo e incluso renovando el neceser.
Artículo elaborado por Carmen Díaz, directora del centro de estética Germaine Goya
© iStock
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