Embarcamos por la puerta Nº5 del particular aeropuerto del imaginario Lagerfeld. El genio de Chanel se sacó de la manga un desfile de altos vuelos que incendió las redes sociales a golpe de hashtag. #Chanelairlines planea sobre el tejido denim y lo eleva a cuotas que rozan el arte. De Francia a Italia y tiro porque me toca. En los dados vuelve a salir hashtag, esta vez #Italiaislove. Dolce & Gabbana se resiste a abandonar un folclore que pone la vida a todo color y nos envía postales desde Capri, Palermo o Pisa impresas en vestidos que respiran tradición.
Tisci para Givenchy nos traslada al Manhattan en blanco y negro de las películas de gángsters y desenfunda sus armas en forma de drapeados y encajes. Las guerreras Masai de Valentino reivindican la vuelta del estilo étnico desde el vecino continente y Etro devuelve a la pasarela un renovado barroco con acento francés, envuelto de tules y sedas orientales.
Dale al [play], que con el reggae que desprende la última colección de Hilfiger nos vamos de viaje. Abróchense los cinturones (a poder ser el “doble G” de Gucci tan requetevisto esta temporada) porque vamos a despegar.
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Aquí tienes tu billete en preferente por las tendencias en 11 escalas. Que lo disfrutes.
1. Pijama Party
Encabezando la lista de tendencias top tenemos el Slip dress o “cómo salir a la calle tan contenta en camisón”. Además, el clásico pijama dos piezas masculino despierta de su letargo y se adapta a nuestra silueta con mucha comodidad. Saca a pasear tu lencería y luce satén sin complejos. Balenciaga te respalda.
2. Athleisure
Es la revisión del look atlético encabezada por las bombers en versión deluxe. Soldados y jugadores de béisbol han defendido esta chaqueta durante años y ahora nos muestra su cara más femenina a base de bordados, colores y transparencias. Los pantalones de chándal (¡sí, esos de tres rayas!) también reclaman su lugar en el día a día.
3. Exaltación patriótica
Barras y estrellas que juran lealtad al American Way of Life y tres colores: el blanco, rojo y azul que reivindican la bandera francesa. Los galos sacan pecho y gritan Liberté también sobre las pasarelas.
4. Tendencia Safari
I had a farm in Africa... El estampado tribal se erige como el rey de la jungla y reaviva el toque étnico a base de plumas, colores caoba y vestidos de diosa zulú cosidos al detalle.
5. Logomanía
¡Que se note! Tendencia no apta para discretas. Vuitton, Moschino o Miu Miu dan visibilidad a la marca y reivindican la vuelta de sus icónicos logos estampados en versión maxi.
6. Futurismo de metal
Las prendas se tiñen de plata y relucen sin pudor en outfits monocromáticos al más puro estilo Rabanne. El futuro se hace presente esta primavera para brillar con luz propia.
7. Superposiciones
Las pasarelas dictan un "me lo pongo todo" y superponen prendas sin ton ni son que consiguen quedar bien como por arte de magia. Pucci lo sabe y mezcla jerseys de punto con tops por encima.
8. Vestidos románticos
En un combo de organza etérea y tonos pastel, estampados de flores de arriba a abajo o con detalles neovictorianos, los vestidos se ponen de tiros largos y nos regalan una cara ultra femenina para esta primavera.
9. A rayas
Pablo Picasso o Brigitte Bardot pusieron las camisetas de rayas en el mapa, dejando un legado inmortal. Esta temporada se despojan de su espíritu marinero, mostrando a todo color su lado más caótico.
10. Petos
Los famosos dungarees ya presentes en otras temporadas, vuelven en versión oversize de la mano de Chloé, que todo lo transforma. Es una prenda todoterreno despojada de sus reminiescencias adolescentes. ¿Cómo se lleva esta primavera? Apuéstalo todo al cropped top.
11. Punto y final
Crochet, ganchillo o cómo quieras llamarlo, pero debes llenar tu armario primaveral con el punto más setentero. El espíritu hippy se plasma en vestidos, chalecos extra largos y tops de cuello halter que no tienen reparos en llenarse de color.
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La moda es el arte cosido a puntadas y esta primavera se pone de manifiesto más que nunca. Con temporadas así hay que quitarse el sombrero. Póngame cuarto y mitad de cada desfile y diez maletas para facturar, por favor. ¡Me lo llevo todo!
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