Si la idea te parece creativa, no fue menos original la manera en la que esta fotógrafa se planteó hacer este tipo de calendario. La idea surgió mientras esperaba en la fila de Starbucks en Seattle, momento en el que se detuvo a mirar a un hombre que se encontraba en el establecimiento con una prominente barba, con un aspecto cuidado y saludable. Fue en ese momento en el que Stephanie Jarstad se dijo a sí misma: "Sería divertido hacer un proyecto de fotografía para Movember para apoyar la salud de los hombres", y así fue.
El 'making of' del calendario
Aprovechando el viaje que tienía planeado a Utah para hacer las fotos de una boda, Stephanie planteó un casting en Facebook e Instagram dirigido a hombres barbudos que se encontrasen en Utah, Estados Unidos. Tenía claro que quería hacer algo peculiar y divertido, pero dudaba sobre los detalles para llevarlo a cabo. Las barbas de flores ya eran una tendencia, así que pensó que había que innovar con adornos acordes con las diferentes estaciones del año. Esta idea pronto se convirtió en un reto personal y muy emocionante para la fotógrafa, que se las tuvo que ingeniar para dejar a un lado los tópicos y pensar en adornos creativos que fueran lo suficientemente pequeños como para golgarlos de la barba de alguien.
Los modelos barbudos
Acostumbrada a fotografiar bodas y hacer reportajes familiares o de pareja, nunca se había visto en la tesitura de buscar este tipo de modelos. Por ello, cuando se presentaron en su estudio, la situación fue un tanto peculiar. Tras mantener una pequeña charla con ellos, entre risas y bromas, Stephanie se quedó muy sorprendida por la disposición que mostraron todos ellos para apoyar su iniciativa. Una vez finalizada la sesión de fotos quiso agradecerles su intrépida colaboración, ya que probablemente continúen encontrando alfileres y restos de purpurina en sus barbas por una temporada.
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