Resulta imposible obviar una prenda como la chaqueta de cuero. Vuelve temporada tras temporada, mirándonos de reojo, llamando nuestra atención... y a nosotras se nos cae la baba. Pero ¿cómo hay que llevarla? ¿Es mejor comprarla corta o larga? ¿Qué nos ponemos debajo? ¿Un vestido? ¿Una camiseta básica y unos pitillo? Si andas un poco perdida, aquí tienes nuestros consejos para ir a la moda en lo que a chaquetas de cuero se refiere.
La chaqueta de cuero: ¿cómo elegirla?
Cada año sucede lo mismo, vemos chaquetas de cuero por todas partes. Y está claro que se trata de una prenda de entretiempo, para llevarla en otoño o primavera, porque en invierno no nos atrevemos con ella. Lo primero que debemos tener en cuenta es que se trata de una prenda que puede llevar todo el mundo, desde la fashionista más declarada, hasta las usuarias de tallas grandes, pues no existe un criterio concreto que describa cómo hay que lucirla. La clave está en elegirla bien.
¿Cómo es la chaqueta de cuero ideal? Muy fácil, la perfecta es la más sobria de todas. Olvídate de modelos largos, propios de los vampiros; evita también los que estén plagados de chapitas, dejémoslas para los raperos, y aunque lleves el lookrock en la sangre, huye de los grandes emblemas tipo Harley Davidson y demás. Es realmente excesivo. Por otra parte, si buscas un pequeño toque de fantasía, puedes dárselo tú misma gracias al artículo en el que te contamos cómo personalizar una chaqueta.
Resumiendo: la chaqueta que buscas es sobria y con un corte de líneas sencillas. En cuanto al color, apuesta por los tonos seguros como el negro, el camel, ahora tan de moda, o el marrón. La chaqueta debe ser, además, flexible, estrecha y, sobre todo, corta.
Importante: Con la chaqueta de cuero negra pasa como con los tejanos, no hace falta que se vea que la acabamos de comprar, elige un modelo que parezca que tenga unos años, aunque en realidad acabe de salir de la tienda.
Mi chaqueta de cuero
Ahora que ya sabemos cómo es la chaqueta de cuero ideal, centrémonos en nuestra silueta para que la prenda nos siente como un guante. Todas queremos una chaqueta que nos quede de maravilla, para ello tendremos que escogerla en función de nuestros hombros, brazos y abdomen. Presta atención.
Si estás rellenita...
Sí, sí, aunque llevemos tallas grandes, podemos permitirnos el lujo de ponernos una chaqueta de cuero. Ahora bien, elegiremos sólo las de cortes rectos. La chaqueta de cuero se lleva bastante ajustada al cuerpo y, al contrario de lo que solemos pensar, los cortes rectos nos sientan mucho mejor que los anchos. Las más lanzadas, dejaremos la parte superior entreabierta para que nuestro generoso pecho se insinúe... El pecho, ¡ése gran signo de feminidad!
Si eres bajita...
La chaqueta debe ser corta. Si nos la quedamos un poco larga, corremos el riesgo de romper la silueta y perecer aún más bajitas. Las más menudas, aparte de corta, deberemos comprárnosla estrecha. Y también tenemos algunos michelines, la mejor opción es la de cintura entallada.
Si eres alta...
...significa que seguramente tus brazos también son largos, por lo tanto puedes permitirte una chaqueta con mangas un poco anchas. La tuya es la de cuero motera: te quedará de lo más elegante.
¿Con qué combinarla?
La chaqueta de cuero se ve guerrillera, incluso masculina, pero no hay que olvidar que somos chicas y que podemos suavizar la prenda con ropa étnica y pantalones largos. También la podemos llevar con un modelo informal compuesto por unos tejanos, unos botines, una camiseta blanca de algodón, un bolso XXL, unas Rayban aviator y un brushingde ensueño. Te verás elegante y extremadamente natural. Y para una salida con las amigas o una cita, nada te impide ponértela con un precioso vestido bucólico o un corpiño negro. En cuanto a la longitud, el límite está en las rodillas. ¡Ya estás lista! ¿Saldrás a comprártela mañana mismo?
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