Un romántico castillo, un vestido de novia de princesa, un caballero andante y una decoración medieval son las claves para organizar una boda de estilo medieval. Además necesitaréis una buena organización, un cuidado máximo de los detalles y mucha imaginación. Os vamos a dar varios prácticos consejos para que tu boda medieval salga perfecta. ¿Os atrevéis a organizarla?
© Noonu fotógrafo de bodas, Madrid
Un romántico castillo
Lo primero que tenéis que buscar es el marco adecuado para organizar una boda medieval. Puede ser un castillo reformado, un palacio antiguo o una fortaleza. ¡Seguro que encontráis algún lugar o parador cercano con este aire misterioso! Además la decoración es fundamental en este tipo de enlaces y tenéis que encontrar elementos como estandartes, escudos, banderas y antorchas. También podéis colocar en el jardín carpas y jaimas de colores que simulen los campamentos medievales para las batallas.
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Un look de princesa
Si la novia quiere sorprender con un original look medieval, tiene que elegir un vestido de estilo romántico o ‘vintage’. Una buena opción puede ser un vestido de corte princesa o imperio de manga larga y con pequeños detalles en hilo de oro o plata. Para el peinado se puede elegir unas trenzas de estilo medieval o una corona dorada o de flores silvestres.
© Barcelona Bridal Fashion Week
Un escenario de cuento
Una buena idea es pedir a los invitados que luzcan un ‘outfit’ medieval y que vayan vestidos de princesas, príncipes, damas de la corte, caballeros o nobles. Tendrán que alquilar los trajes pero seguro que será muy divertido para todos. Si quieres impresionar a los invitados, la novia puede llegar a la ceremonia a caballo escoltada por sus damas de honor y el novio puede estar esperándote acompañado de sus testigos escuderos. Si lo acompañas con una música de bienvenida con trompetas, el ambiente será digno de una boda de cuento.
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Un banquete real
Si queréis que vuestro banquete sea diferente, una buena idea es colocar las mesas en forma de ‘U’ como en las clásicas celebraciones medievales. Durante la comida podréis disfrutar en el espacio que quedará en el centro de las mesas de los entretenimientos de los trovadores o los juglares. Buscad además un buen menú medieval con cordero, cochinillo o carnes a la brasa. Intentad servir un banquete copioso regado con vinos de la tierra servidos en copas de barro.
Como colofón una maravillosa tarta nupcial de postre que cortarán los novios con la espada de caballero del novio. Después del festín, podéis organizar los clásicos juegos de malabares o un improvisado torneo de caballeros. Otra opción original puede ser un espectáculo medieval de fuego o una exhibición del vuelo de imponentes aves rapaces. Y para terminar tenéis que organizar unas danzas medievales con música en directo. Practica con algunos invitados alguna danza para abrir el baile medieval. ¡Seguro que los invitados no se olvidarán de una boda tan original!
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Contenido elaborado en colaboración Carmen F. Etreros de Zankyou
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