Céline Dion : Todos los artículos
No cabe duda de que Céline Dion es un símbolo internacional de la canción. Desde Francia hasta Canadá, pasando por Estados Unidos y Gran Bretaña, la cantante ha vendido más de 150 millones de álbumes en todo el mundo. Céline Dion creció en Charlemagne, cerca de Montreal, en el seno de una familia de músicos.
Comenzó a cantar, junto a sus 14 hermanos mayores, a los cinco años. Con 12 años compuso, con la ayuda de su madre y un hermano, una canción titulada Ce n’était qu’un rêve (sólo ha sido un sueño). Un sueño que se haría realidad cuando, en 1981, envió la cinta al productor René Angelil. Este último, creyó firmemente en la cantante, hasta el punto de hipotecar su casa. Así pues, lanzó a la futura promesa en el mercado canadiense. Una vez conquistada su tierra natal con dos álbumes, uno en francés y otro en inglés, triunfó en Francia con su sencillo D’amour et d’amitié.
En 1988, ganó el prestigioso concurso de Eurovisión representando a Suiza frente a más de 600 millones de telespectadores en todo el mundo. Los estadounidenses se rindieron a sus pies cuando grabó el tema principal de la banda sonora de La Bella y la Bestia. Esta película le brindó la oportunidad de componer un nuevo álbum en inglés.
El esperado regreso de la cantante, en 1995, estuvo marcado por una colaboración con el francés Jean-Jacques Goldman. Esta colaboración motivó la creación del álbum D’eux , en el que encontramos el tema estrella: Pour que tu m’aimes encore. Empleando la lengua de Shakespeare, Céline sacó dos nuevos álbumes, Falling Into You y Let’s Talk About Love. En 1998, colaboró de nuevo con Jean-Jacques Goldman en el título S’il suffisait d’aimer. Su manager, René Angelil, la apoyó más que nunca, entre otras cosas porque se trataba de su marido. Los tortolitos, contrajeron matrimonio el 17 de diciembre de 1994 en la Basílica de Notre-Dame, en Montreal.
La cantante volvió a cautivar a su público con el título principal de la banda sonora de Titanic: My Heart Will Go On. Tras este éxito, la cantante se tomó un merecido descanso; dedicó todo su tiempo a estar con su pequeño René Charle. En 2002, comenzó una nueva etapa con su álbum A New Day Has Come.
En 2003, firmó un contrato en exclusiva, para realizar un espectáculo de 90 minutos, cinco días por semana, durante tres años en el Ceasar Palace en Las Vegas.
El espectáculo fue bautizado como A new day... Una original mezcla de cante, baile, teatro… Su siguiente álbum en inglés se llamó One heart. Para mantener contento a su público francófono, sacó un quinto álbum en francés llamado Une Fille et 4 Types, en el que encontramos a cuatro cantautores: Jean-Jacques Goldman, Erick Benzi, Jacques Vénéruso y Gildas Arze. En sus grandes éxitos de 2005, On ne change pas, rindió un homenaje a sus fans con el sencillo Je ne vous oublie pas (no os olvido).
En 2007, año en el que acabó su contrato en el Ceasar Palace, Céline sacó un nuevo álbum para sus fans francófonos, D’Elles,compuesto únicamente por mujeres.Éste constituyó una especie de réplica a D’eux, álbum compuesto por Jean-Jacques Goldman en 1995. Ese mismo año, también salió al mercado su álbum Taking chances. En febrero de 2011, regresó al coliseo del Caesars Palace para presentar su nuevo espectáculo titulado Céline, el cual tendrá una duración de tres años.
Comenzó a cantar, junto a sus 14 hermanos mayores, a los cinco años. Con 12 años compuso, con la ayuda de su madre y un hermano, una canción titulada Ce n’était qu’un rêve (sólo ha sido un sueño). Un sueño que se haría realidad cuando, en 1981, envió la cinta al productor René Angelil. Este último, creyó firmemente en la cantante, hasta el punto de hipotecar su casa. Así pues, lanzó a la futura promesa en el mercado canadiense. Una vez conquistada su tierra natal con dos álbumes, uno en francés y otro en inglés, triunfó en Francia con su sencillo D’amour et d’amitié.
En 1988, ganó el prestigioso concurso de Eurovisión representando a Suiza frente a más de 600 millones de telespectadores en todo el mundo. Los estadounidenses se rindieron a sus pies cuando grabó el tema principal de la banda sonora de La Bella y la Bestia. Esta película le brindó la oportunidad de componer un nuevo álbum en inglés.
El esperado regreso de la cantante, en 1995, estuvo marcado por una colaboración con el francés Jean-Jacques Goldman. Esta colaboración motivó la creación del álbum D’eux , en el que encontramos el tema estrella: Pour que tu m’aimes encore. Empleando la lengua de Shakespeare, Céline sacó dos nuevos álbumes, Falling Into You y Let’s Talk About Love. En 1998, colaboró de nuevo con Jean-Jacques Goldman en el título S’il suffisait d’aimer. Su manager, René Angelil, la apoyó más que nunca, entre otras cosas porque se trataba de su marido. Los tortolitos, contrajeron matrimonio el 17 de diciembre de 1994 en la Basílica de Notre-Dame, en Montreal.
La cantante volvió a cautivar a su público con el título principal de la banda sonora de Titanic: My Heart Will Go On. Tras este éxito, la cantante se tomó un merecido descanso; dedicó todo su tiempo a estar con su pequeño René Charle. En 2002, comenzó una nueva etapa con su álbum A New Day Has Come.
En 2003, firmó un contrato en exclusiva, para realizar un espectáculo de 90 minutos, cinco días por semana, durante tres años en el Ceasar Palace en Las Vegas.
El espectáculo fue bautizado como A new day... Una original mezcla de cante, baile, teatro… Su siguiente álbum en inglés se llamó One heart. Para mantener contento a su público francófono, sacó un quinto álbum en francés llamado Une Fille et 4 Types, en el que encontramos a cuatro cantautores: Jean-Jacques Goldman, Erick Benzi, Jacques Vénéruso y Gildas Arze. En sus grandes éxitos de 2005, On ne change pas, rindió un homenaje a sus fans con el sencillo Je ne vous oublie pas (no os olvido).
En 2007, año en el que acabó su contrato en el Ceasar Palace, Céline sacó un nuevo álbum para sus fans francófonos, D’Elles,compuesto únicamente por mujeres.Éste constituyó una especie de réplica a D’eux, álbum compuesto por Jean-Jacques Goldman en 1995. Ese mismo año, también salió al mercado su álbum Taking chances. En febrero de 2011, regresó al coliseo del Caesars Palace para presentar su nuevo espectáculo titulado Céline, el cual tendrá una duración de tres años.