Bien sea una cena familar o un evento de trabajo, la cantidad de compromisos que tenemos en estos días pueden convertirse en un quebradero de cabeza a la hora de elegir el look ideal para cada ocasión. La clave está en elegir los tonos que mejor le vayan a nuestro color de ojos, y conseguir un equilibrio con los labios, eligiendo la parte que queremos resaltar.
En este caso, el protagonismo del maquillaje se centra en los ojos, dejando los labios muy naturales, para así no excedernos y mantener en todo momento un look fiel a nuestro estilo, y destacar nuestros rasgos más bonitos.
1. Base de maquillaje
El primer paso para conseguir un maquillaje perfecto es preparar la piel, y para ello tiene que estar perfectamente hidratada. Una vez aplicada la hidratante llega el turno de la base de maquillaje, con la que deberemos trabajar para conseguir la cobertura deseada en función de nuestra piel.
2. Corrector
A continuación llega el momento de aplicar el corrector, tanto en la zona de la ojera como en las imperfecciones que podamos tener y no hayamos conseguido cubrir con la base. Lo más importante es elegir correctamente el tono que más se ajuste a nuestra piel, ¡que no queremos saber nada del odioso "efecto antifaz"!
3. Sombras de ojos
Una vez tenemos nuestra piel preparada, ya tenemos listo el lienzo sobre el que empezar a trabajar, y podemos comenzar a aplicar la sombra de ojos. En este caso, la tonalidad elegida fue la de los rosados y los malvas, para hacer un contraste con el color verde del iris. Además, el maquillador de Dolce & Gabbana me aplicó un tono perla en el arco de la ceja, para abrir la mirada e iluminar.
4. Delineado
Para añadirle aún más intensidad al look y cederle todo el protagonismo a los ojos, delineamos la línea de las pestañas en negro, con un delineador líquido, y realizando un trazo grueso. ¡Ideal para un look de fiesta muy marcado!
5. Máscara de pestañas
El último paso antes de finalizar el look de ojos es aplicar una buena capa (o dos) de máscara de pestañas, que le añada a la mirada ese toque elegante y misterioso. ¿Un truco de maquillador? Al aplicar el rímel utiliza un pañuelo de papel y colócalo entre tus pestañas y el párpado. Así no solo conseguiras que la aplicación sea más limpia, sino que evitarás que mancharte y echar por tierra el trabajo que ya habías hecho.
6. Cejas
Un paso muy importante en cualquier maquillaje, y del que nos solemos olvidar, es retocar nuestras cejas. Ellas son las que enmarcan nuestros ojos, y su forma puede cambiar por completo la expresión de nuestro rostro, ¡no las podemos pasar por alto! Con un pincel biselado, aplica un tono de sombra similar al de tu ceja y rellena los huecos, dándole la forma idónea para tu rostro.
7. Polvos compactos
Una vez que hemos acabado con los ojos, llega el momento de sellar la base de maquillaje que hemos aplicado por todo el rostro. ¿Por qué ahora y no antes? ¡Muy sencillo! Si por cualquier motivo, cometemos un error en el maquillaje de ojos, o utilizamos sombras muy volátiles y que dejan residuos, podremos corregir la parte afectada antes de sellar el maquillaje con los polvos.
8. Colorete
Para finalizar con el rostro, solo queda aplicar el colorete. En esta ocasión el tono elegido por el maquillador de Dolce & Gabbana fue un rosa clarito, que destacaba sobre el color de la piel, pero sin robarle protagonismo a los ojos.
9. Labios
Por último le llegó el turno a los labios, y ya que la idea era dejarlos muy naturales, se optó por aplicar una pequeña cantidad de un labial en un tono amatista, que le aportase algo de color pero de forma sutil. Una prueba de que no debemos dejarnos asustar por el color de una barra, tan solo hay que jugar con la intensidad para obtener un resultado totalmente diferente.
Resultado final
Ya tenéis todas las claves para recrear este look en casa. ¡Manos a la obra!
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