¿Quién no ha soñado alguna vez con levantarse maquillada y perfecta para afrontar el día con mejor cara? Para aquellas que estamos acostumbradas bien sea por nuestro trabajo o bien por decisión personal a maquillarnos en nuestro día a día el maquillaje permanente se convierte en una solución muy práctica. ¿Sabes de qué se trata? Te lo contamos todo al detalle.
¿Qué es el maquillaje permanente?
El maquillaje permanente es como un tatuaje. Un tatuaje, algo particular, que se realiza con unas agujas ultrafinas a nivel epidérmico. Se inyectan pigmentos en la superficie de la piel, bajo pequeños vasos sanguíneos. Estos pigmentos se prueban con anterioridad en un laboratorio para asegurar que no producen reacción alérgica alguna. Evidentemente, eres tú la que elige el color. Esta técnica sirve para redibujar cejas poco pobladas, perfilar unos labios demasiado finos o mal perfilados, pintar la raya del ojo, disimular una cicatriz o hasta para hacerte un lunar.
Uno de los tratamientos de maquillaje permanente más conocidas que son tendencia en los últimos tiempos es el microblading de cejas. Se trata de un tatuaje hecho con unas agujas finísimas, cuyos pigmentos imitan el pelo de la ceja. Sirve para poblar las zonas con menos pelo de tus cejas, con un resultado muy natural que conseguirá que tengas unas cejas pobladas y definidas, sin que se aprecie ningún tratamiento. Puedes conseguir un efecto muy parecido al del microblading con el maquillaje para cejas, no es definitivo, pero te permitirá obtener un resultado muy natural. Te recomendamos el maquillaje para cejas de Rimmel London por 3,75€.
El maquillaje permanente es también muy demandado en las clínicas de estética para cubrir cicatrices en la piel. La micropigmentación para cicatrices permite corregir la diferente tonalidad que existe entre la cicatriz y la piel que no sufre ninguna lesión. Los pigmentos se introducen en la epidermis y la duración del tatuaje es de unos 2-3 años, depende de los cuidados. Si quieres atenuar las cicatrices, también puedes optar por tratamientos específicos que ayuden a regenerar la piel y disminuyan visiblemente la apariencia de las cicatrices. Un buen ejemplo es la crema ISDIN Cicapost, con centella asiática y glicerina reduce las marcas causadas por una intervención o una herida. Puedes comprarla en Amazon por 11,65€.
© Pinterest / ShopStyle
¿Cómo se hace?
Tras haber realizado un trazo con el lápiz, el experto introduce los pigmentos milímetro a milímetro con una aguja y siempre bajo los efectos de la anestesia local. Duele mucho menos que un tatuaje común.
Una intervención de este tipo dura una media de 1 hora. Dos semanas más tarde hay que volver a hacerte un retoque. La piel queda un poco roja y algo inflamada entre los primeros 8 y 15 días tras la intervención. Por tanto, las zonas retocadas deben limpiarse bien con un antiséptico.
El hecho de que las agujas sean tan finas, consigue el efecto de micropigmentación en la piel que hace que el resultado sea muy natural.
Permanente pero no definitivo
Es un maquillaje que llevarás a diario, así que tiene que ser algo natural, lo que no impide que se pueda intensificar según el gusto con un maquillaje tradicional. Con el paso del tiempo y la exfoliación natural de la piel, los pigmentos se eliminan y el color se atenúa. Todo depende de la velocidad con la que la piel se renueva, los colores que se han utilizado y el estilo de vida de la persona (el sol, por ejemplo, altera los pigmentos). El maquillaje, por tanto, es permanente pero sólo durante 2 o 3 años. Piensa en un tatuaje convencional, la tinta se va absorbiendo con el paso del tiempo, especialmente si la sometemos a agresiones externas como los rayos del sol.
Los tatuajes del maquillaje permanente, al ser extremadamente delicados, son mucho más sensibles al paso del tiempo que un tatuaje normal, aunque te durarán varios años, lo que te permitirá tener un aspecto de "buena cara" aún sin maquillaje. Se trata de uno de los tratamientos más demandados en los salones de estética, aunque es cierto que con el paso de los años ha perdido cierta popularidad. Eso sí, tratamientos de micropigmentación como el microblading que te hemos mencionado previamente son más tendencia que nunca, gracias a sus espectaculares resultados.
Ventajas del maquillaje permanente
- El maquillaje permanente siempre está perfecto: no se corre, no se va y siempre está impecable sea cual sea el momento del día y estés donde estés.
- Apenas se sangra con esta técnica, por lo que estás presentable rápidamente.
- El hecho de pincharte estimula la microcirculación y activa la actividad de las células: las arruguitas se atenúan, sobre todo, alrededor del labio.
© Getty
Precauciones que debes tomar si te decides por el maquillaje permanente
- Antes de decantarte por el maquillaje permanente, piénsatelo bien. Al fin y al cabo será algo que luzcas en tu piel durante mucho tiempo.
- Elige a un especialista con experiencia, un dermatólogo o un centro especializado.
- Antes de realizar la intervención, exige un presupuesto en el que se precise el precio y la parte del rostro que se retocará. Haz que se indique que la consulta informativa es gratuita y qué pigmentos se utilizarán. Los colores y los trazos que se apliquen deben ser de tu gusto.
- Exige que se utilicen pigmentos naturales, porque no son nocivos para el cuerpo.
Precios aproximados del maquillaje permanente
- Cejas: 400 - 500 €
- Labios: 400 - 600 €
- Raya del ojo completa (superior e inferior): 500 - 600 €
- Lunar: 50 - 100 €
En resumen, si quieres que el maquillaje que mejor te sienta vaya siempre contigo, sin necesidad de cosméticos ni de retoques, los tatuajes permanentes pueden ser una buena opción. Gracias al uso de agujas muy finas, los pigmentos quedan en la epidermis con un resultado natural.
LETTER
Y además...
Sérum de pestañas a test: estos son los más eficaces
Colorete: el manual de uso definitivo
¿Conoces los mejores trucos de maquillaje para afinar tu nariz?
Hazte la manicura semi permanente en casa con estos consejos
¿Cómo conseguir una depilación de cejas perfecta?
