A estas alturas no hay prácticamente nadie que no se haya dejado conquistar, al menos un poco, por la personalidad de esta neoyorquina de 34 años. Actriz, protagonista de Y de repente tú, productora, humorista y escritora, Amy Schumer ha demostrado siempre su sinceridad y naturalidad dentro de un mundo tan frívolo y complicado como puede ser Hollywood en muchas ocasiones. Aunque ha sido criticada por sus "kilos de más", la nueva reina de la comedia siempre ha demostrado que las opiniones de los demás le dan absolutamente igual. En esta ocasión, criticó especialmente los cánones de belleza impuestos por la industria, a quien la actriz reprochó que solo contratan a actrices delgadas.
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Durante su discurso en la gala de los Critics' Choice Awards, tras haber recibido el galardón de MVP, Shumer explicó que, por desgracia, si eres actriz y "tienes este área de aquí" (señalando su tripa y sus caderas), tienes que escribir tus propios papeles para poder trabajar de lo que quieres. Algo que a ella también le ha pasado.
No es la primera vez que Amy habla sin pelos en la lengua de este tema. El pasado verano, en una entrega de premios de la revista Glamour, la actriz criticó precisamente a las revistas femeninas por el tipo de mujer que suelen poner como protagonistas de sus portadas. "Muchas revistas femeninas te hacen sentir mal solo por haber nacido con una vagina. No voy a pedir disculpas por lo que soy. No voy a luchar por alguna otra versión de mí misma. Peso 72 kilos y puedo conseguir un pene cuando quiera, no es un problema"
Amy, al igual que su íntima amiga Jennifer Lawrence, también ha denunciado la desigualdad que existe en Hollywood, especialmente en cuanto a salarios y concretamente dentro de su ámbito. Confiesa que no es fácil ser mujer y humorista, ya que cuesta que te tomen en serio. "A mi me han catalogado como 'cómica sexual', simplemente por lo que digo y por ser una mujer. Y sin embargo, un hombre puede subirse a un escenario, sacarse el pene, y ya es todo un pensador", comentó en uno de sus diálogos. Aún así, Amy ha conseguido callar a quienes dudan de su trabajo: en junio, se convertirá en la primera humorista femenina en actuar en el Madison Square Garden
Amy ha demostrado ser una mujer sincera, carismática, orgullosa de su cuerpo (fue protagonista del último calendario Pirelli) y sin nada que ocultar. Ella saca pecho incluso de sus supuestos defectos y no aparenta ser alguien que no es. Sabe reírse de todos y, lo más importante, también de ella misma. ¡Nos encanta!
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