Son muchas las mujeres que han sido víctimas de violencia doméstica y, la mayoría de ellas, por no decir todas, reconocen que la independencia y solvencia económica, así como la estabilidad laboral, son fundamentales para poder dar el gran paso del abandono y conseguir desvincularse definitivamente de sus parejas. Así lo corroboran los testimonios de algunas de ellas con las que hemos hablado desde enfemenino.com. Destacar además que, de acuerdo con el estudio de Addeco, el 73% de las encuestadas no tenían empleo cuando sufrieron las agresiones conyugales.
Las tasas judiciales: otro handicap
A la crisis económica y sus preocupantes consecuencias se une la subida de las tasas judiciales. Si bien denunciar ante la policía continúa sin suponer ningún gasto económico, lo cierto es que, conforme a las declaraciones realizadas la semana pasada por la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Genero del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Inmaculada Montalbán, "romper el último lazo con el agresor recurriendo al divorcio y repartir los bienes del matrimonio será ahora más caro" y, por consiguiente, la subida de las tasas judiciales será, probablemente, "un obstáculo para que las mujeres víctimas de la violencia sigan adelante con los procesos judiciales."
A este respecto, cabe destacar que el Consejo General del Poder Judicial está realizando un informe en el que pondrán sobre la mesa el impacto general, y por apartados, que esta subida de las tasas podría tener sobre la vida pública y sobre ciertos derechos recogidos en la Constitución, que podrían verse vulnerados, como el derecho a la tutela judicial efectiva, según anunciaron cuando se hizo pública la medida.
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