Ser madre es un hecho muy importante en la vida de toda mujer. La maternidad debería suponer una alegría, por eso es importante saber elegir el momento adecuado para tener hijos. Una estabilidad económica y emocional son dos de los pilares fundamentales que pueden ayudar a construir una buena vida en familia. La UNAF realizó el otro día una jornada para analizar las maternidades vulnerables que existen, y hemos recogido algunos datos que nos han parecido interesantes.
© Getty
La inmigración, la falta de recursos económicos, la oportunidad de encontrar un trabajo o la ausencia de una segunda figura paterna o de apoyo familiar, son factores que perjudican la maternidad. Desgraciadamente, con la crisis que vivimos, estas situaciones las viven muchas familias en su día a día. Por eso, la UNAF cuenta con programas de apoyo como el de Atención a la Maternidad en Riesgo, Madres Entre Dos Culturas y Madres Adolescentes y Jóvenes.
Precisamente, la adolescencia es una de las etapas más sensibles y vulnerables. En la reunión se insistió en la importancia de saber actuar en situaciones de conflictos juveniles. Es necesario tener una base familiar sólida que fomente la responsabilidad, el apoyo y el crecimiento personal de los hijos.
La violencia de género, por desgracia, constituye otro factor de riesgo para la maternidad. Gemma Linares, educadora social, explicó que las mujeres que sufren malos tratos pueden llegar a desarrollar una menor empatía hacia sus hijos: la atención y el cuidado de los mismos se pueden convertir en una sobrecarga. Es importante salir de esa situación de maltrato y velar por lo que realmente importa: la estabilidad y felicidad de madres e hijos.
LETTER
Y además:
La mayoría de las madres prefieren dar el pecho a sus bebés
“El día que dejé de decir aquellas palabras a mi hija”: Emotiva confesión de una madre ocupada
