Café, té, refrescos... Muchas cosas, incluyendo muchos alimentos, están prohibidas o no son bienvenidas durante los nueve meses de embarazo. A menudo con razón, pero también hay muchas medias verdades y rumores contradictorios en circulación, que en ocasiones pueden causar dudas y hasta pánico en algunas mujeres embarazadas.
Por supuesto, toda madre sólo quiere lo mejor para su hijo y quiere evitar cualquier riesgo. Sin embargo, todas las amantes del té pueden respirar tranquilas, ya que no es una bebida contraindicada durante el embarazo. Solo hay unas pocas excepciones en las que debe poner especial atención.
El té, además de estar muy rico, es un gran remedio casero para una amplia gama de dolencias durante el embarazo. Sin embargo, hay que tener cuidado con las cantidades. Una o dos tazas al día está bien, pero no debes pasar de ahí, ya que hay algunas plantas que habitualmente se usan en los tés y que consumidas en grandes cantidades pueden tener una influencia negativa en el embarazo.
1. Té contra las náuseas y las dolencias gastrointestinales en el embarazo
La mayoría de las mujeres embarazadas sufren de náuseas durante los tres primeros meses de embarazo. El té es un gran remedio casero contra estos síntomas. Simplemente bebe té de manzanilla, té de hinojo, té de menta o té de jengibre según sea necesario.
Si sufres de acidez estomacal, la mejor opción es beber una taza de té de hinojo, aunque la manzanilla también es útil. Si estás estreñida, el jengibre y el té de escaramujo te ayudarán.
2. Té contra la retención de líquidos durante el embarazo
Las mujeres embarazadas conocen muy bien los efectos de la retención de líquidos. El té de ortiga tiene efecto drenante, pero antes de tomarlo debes consultar a tu médico o ginecólogo para asegurarte de que está indicado en tu caso, y beberlo siempre en pequeñas dosis.
3. Té contra los resfriados en el embarazo
Los medicamentos están prácticamente prohibidos durante el embarazo. Por ello, si una mujer embarazada coge un resfriado, no le qued más remedio que pasarlo sin ayuda de ningún fármaco. Sin embargo, hay muchos tipos de té que ayudan contra la tos, el resfriado y el dolor de garganta.
El té de salvia es un gran remedio casero para la afonía y el dolor de garganta. Sin embargo, durante el embarazo es mejor hacer gárgaras con él, ya que puede favorecer la aparición de contracciones. El té de tomillo es bueno para la tos.
4. Té relajante durante el embarazo
Un bebé significa un gran cambio en tu vida, y pensar en su llegada puede ponerte nerviosa. También hay un té que puedes beber durante el embarazo que te calmará un poco los nervios.
El té de melisa y lavanda ayuda contra la inquietud y el nerviosismo. El té de manzanilla no sólo ayuda contra los dolores de estómago, sino que también puede ayudar a dormir mejor.
Este té está permitido durante el embarazo
La mayoría de los tés están permitidos durante el embarazo. Puedes beber té de frutas y té de rooibos con la conciencia tranquila. Los tés de hierbas mencionados anteriormente, por su parte, también están permitidos pero debes tomarlos con moderación.
¿Sabías qué? Las matronas recomiendan el té de hoja de frambuesa a partir de la semana 37 de embarazo. Se dice que esto relaja los músculos de la zona pélvica y que el té promueve las contracciones.
Es mejor evitar este té durante el embarazo
Sin embargo, también hay algunos tés que no debe beber durante el embarazo:
- El té verde y el negro están permitidos con moderación. Hasta tres tazas al día está bien, siempre y cuando no bebas café también. La razón: el té verde y el negro contienen cafeína, igual que el café.
- Lo mismo se aplica al mate, al matcha y al té oolong.
- También deberías beber sólo pequeñas cantidades de té Yogi.
Los siguientes tipos de tés de hierbas están desaconsejados:
- Té de hierba de San Juan
- Té de Flor de la pasión
- Té de romero
- Té de raíz de regaliz.
El té en el embarazo: consejos generales
- Bebe el té mejor sin azúcar y sin edulcorante.
- Alterna las variedades de té y no bebas varias tazas de un mismo tipo durante varios días seguidos.
- Si te pillan los meses de verano en mitad de tu embarazo, puedes puedes optar por tés frios para refrescarte.
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