"...Y fueron felices para siempre”. Así solían terminar por lo general, la mayoría de los cuentos de nuestra infancia, ¡y no hablemos ya de los protagonizados por princesas en las almibaradas versiones Disney!
Pero, ¿cuánto hay de cierto en esos finales utópicos de cuento en los que todo salía a pedir de boca? Conforme hemos ido creciendo, la mayoría de nosotr@s nos hemos ido dando cuenta de que, siendo francos, había poco o nada de realidad en aquellas historias de conclusión perfecta.
¿Príncipes azules?, ¿princesas sin manías? ¡Ja! Algo así debió pensar la artista y fotógrafa Dina Goldstein quién, en su último proyecto `Fallen Princesses´ imagina y recorre las miserias de la posible suerte que podrían haber corrido algunas de las princesas de cuento más famosas de todos los tiempos.
"Comencé imaginando las perfectas princesas de Disney, yuxtapuestas con los problemas que afectan a las mujeres de mi entorno, como problemas de salud, adicción y autoestima”. "Con fondos limitados, empecé a montar mi serie".
Ahora el proyecto ha alcanzado fama internacional y, gracias a la notoriedad que la artista ha alcanzado en la red, ha conseguido exponer en relevantes galerías de todo el mundo y compartir su obra con miles de visitantes que descubren, no sin cierta sorpresa, que las princesas de los cuentos de su infancia, eran mujeres normales y corrientes: perfectas tal y como son, pero también con defectos, inseguridades y problemas del día a día. Y es que, ser princesa Disney ya no es lo que era…
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