Experiencias traumáticas: actores que no volvieron a ser los mismos después de un papel

Hay papeles que pueden cambiarte la vida... y no precisamente para bien.

Eso es lo que les ocurrió a las actrices y actores que protagonizan nuestro artículo. En cierto momento de sus vidas, mientras trabajaban rodando una película o alguna serie, llegaron a tomarse tan en serio su trabajo que perdieron la noción de quiénes eran ellos mismos. Hay intérpretes que se dejaron consumir por sus propios personajes, como fue el caso del desaparecido Heath Ledger, quien interpretó al Joker en la película de El Caballero Oscuro. Uno de sus mejores papeles por el que le concedieron después el Oscar póstumo, pero también fue el trabajo que más le obsesionó en toda su carrera.

Y el no fue el único que pagó un alto precio a cambio de una interpretación estelar. Johnny Depp o Adrien Brody también se prepararon sus papeles de manera obsesiva. Hay casos en los que, además, el director de la película también ha influido, presionando a sus actrices hasta el punto de volverlas locas, como fue el caso de Shelley Duvall en El Resplandor. Y también hay quienes, tras rodar una película de terror, incluso han llegado a sentir fenómenos paranormales…

¿Hasta qué punto puede cambiarle la vida un papel de cine a un actor? ¿Cuánto pueden llegar a obsesionarse? Te contamos las historias detrás de todos actores que no volvieron a ser los mismos después de un rodaje.

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