El horno tradicional
También llamado de “convección natural”, este tipo de horno calienta gracias a una resistencia ubicada en la parte superior e inferior del electrodoméstico. Es el horno más sencillo de utilizar y es ideal para hacer rustidos y carne roja debido a la cocción en superficie. Por el contrario, el tiempo de precalentamiento es importante y desprende muchísimo calor. Cuando lo utilicemos, hay que vigilar y no encender todos los electrodomésticos al mismo tiempo.
El horno multifunciones
Permite elegir entre diferentes modos de cocción. A la convección natural se le añade un sistema de calor giratorio. ¿Cómo funciona? El aire caliente circula en el horno y se proyecta sobre los alimentos para que estos se hagan rápido y del todo. Se pueden cocinar diferentes platos en cada una de las bandejas sin que los sabores se mezclen. Atención al ruido del ventilador.
El horno de vapor
No se trata de un horno al alcance de todo el mundo porque es bastante caro. Así que los principiantes absteneos. En cambio, si eres un adicto a la cocina o casi un profesional, éste es tu horno. Su principal ventaja: que permite conservar mejor las vitaminas y sales minerales de los alimentos durante su cocción. Además, podremos cocer, descongelar y recalentar la comida en un momento gracias a sus diferentes opciones.
El horno microondas
El microondas se ha hecho un hueco en todos los hogares, ¡como la tele! Sus funciones principales son descongelar y recalentar. Ahora bien, hay algunos microondas que también gratinan y doran. Los hornos microondas con multifunciones combinan el microondas, el grill y la convección tradicional. Eso sí, nunca conseguirán sustituir al horno clásico.
Criterios que hay que tener en cuenta para elegir el horno
La capacidad del electrodoméstico es determinante. Si en casa sois muchos, si recibes invitados a menudo, debes saber que la capacidad del horno siempre se expresa en litros y va de los 9 a los 40 l. Comprobar el diámetro del plato giratorio es un inteligente primer paso. A continuación, echa un vistazo al modo de programación para ver si se trata de un minutero mecánico de rueda o de uno electrónico.
El electrónico es más práctico si buscamos una cocción precisa. La potencia de cocción también es muy importante ya que ésta determina la eficacia y la velocidad de la cocción. Se requieren 750 W para cocer bien los alimentos y 1000 W para gratinarlos. En cuanto al revestimiento, piensa que el acero inoxidable es fácil de limpiar y que la cerámica esmaltada difunde el calor en profundidad.
Trucos para elegir el horno
Sobre todo que tenga una buena ventana, muy práctica para controlar la cocción sin tener que abrir el horno ni perder calor. Que cuenta con accesorios: una placa, el grill y el asador. En seguida te darás cuenta de que no son simples gadgets. El programador automático es muy útil por si llegas tarde de trabajar o quieres limpiar la casa el domingo por la mañana. Asegúrate de que la puerta del horno está fría o templada cuando la abras para no quemarte.
Diferentes temperaturas del horno
Un horno requiere un tiempo de precalentamiento de entre 10-15 minutos. Aquí van algunas equivalencias...
Horno
Termostato
Equivalencias al otro lado del Atlántico
Horno casi frío
30° C - 90° C (termostato 1-3)
85° F - 195° F
Horno tibio
100° C - 110° C (termostato 3-4)
200° F
Horno un poco caliente
150° C - 180° C (termostato 5-6)
300° F - 350° F
Horno caliente
180° C - 220° C (termostato 6-7)
350° F - 420° F
Horno muy caliente
220° C - 270° C (termostato 7-9)
450° F - 520° F
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