Cuando me hablaron de Dabbawala lo primero que pensé fue "Dabba...what?". Pronto me enteré de que la razón del nombre escogido para este restaurante tenía su miga: los dabbawalas son los encargados de repartir las comidas, realizadas por las esposas o madres, a los trabajadores en la India. Sin embargo, la gastronomía de este espacio se haya lejos de la influencia hindú, definiéndose más como una cocina de mercado con platos clásicos de corte internacional. Así, podremos encontrar propuestas como presa ibérica con quinoa y salsa española (22 €); lomo de venado con calabaza, coliflor y sésamo (23 €); carabinero con manitas de cerdo y tocino de bellota (9€); ensaladilla de cangrejos de río (15,90 €)... ¿Quieres ver más? Pincha aquí.
En este centro, nuevo paraíso foodie de Chamberí, cualquier opción es buena porque "se apuesta por el producto". Así nos presentó la carta el sumiller Pablo Tamargo, fundador del restaurante junto al chef Luca Rodi, encargado de la cocina y de seleccionar diariamente los mejores alimentos del mercado. Juntos crearon, hace ya 5 años, un restaurante acogedor, de decoración vintage, dividido en dos espacios para dar respuesta a dos conceptos diferentes:
- Dabbawala Restorán: Ideal para una cena romántica o una comida en familia o de empresa. Cuenta con un espacio rodeado de columnas de madera que aporta calidez al conjunto. Las mesas están muy separadas, lo que invita a una experiencia íntima y agradable.
- Dabbawala Underground: situado en la planta de abajo del local, se trata de un espacio más informal de techo abovedado con ladrillo visto y una amplia barra. También tienen una sala privada para celebrar todo tipo de eventos.
Un lugar para descubrir
En Dabbawala nos lo ponen muy fácil. Podemos elegir a la carta o bien optar por uno de sus menús. El más económico, que cuenta con aperitivo, 4 platos y postre, cuesta 35 euros por persona. También puedes optar por el menú degustación de 9 platos por 55 € (85 € con maridaje). Ambas son opciones perfectas para descubrir la amplia variedad gastronómica que ofrecen, siempre en función de sus productos de temporada.
Armonía de sabores
Una de las cosas que destaca en la cocina de Dabbawala es el equilibrio e intenso sabor de cada uno de sus platos. Desde sus aperitivos hasta sus postres, sus propuestas están cuidadas con mimo y esmero de forma individual y todas ellas forman parte de una historia en la que el hilo conductor es la creatividad. "Para mí, la parte creativa de la cocina es lo más bonito", comenta Luca Rodi. "Cada plato surge de manera diferente. A veces la idea nace comiendo en un restaurante, leyendo algo que no tiene que ver con la gastronomía o queriendo emular la cocina de una época. Y se trata de probar, probar y probar. En ocasiones acaba en algo diferente a lo que tenía en mente. Otras veces destierro la idea porque no ha dado el resultado que quería", añade.
La otra mitad del restaurante, Pablo Tamargo, se encarga del maridaje, acompañando las propuestas de Rodi con los mejores caldos. Su objetivo: mantener viva una carta de vinos con las mejores referencias.
Ambos forman el tándem perfecto para hacer de este espacio uno de los mejores sitios del barrio. Ideal para una comida relajada y disfrutar de cada bocado.
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