Con la vuelta al cole y a las actividades extraescolares, nuestros hijos pasan más tiempo en compañía de otros niños. A veces, las clases o el patio del colegio en el que el contacto entre los niños es muy elevado, se convierten en el escenario ideal para que estos pequeños insectos tan molestos hagan su aparición y se acabe produciendo una infestación de pediculosis. Aunque mantengamos en casa unos correctos hábitos de higiene, la Asociación Española de Pediatría (AEP) advierte que no se puede evitar el contagio de los piojos.
Por eso es importante observar a nuestros hijos de vez en cuando para comprobar si existe el riesgo de que estos insectos habiten en su cabeza: si observamos que los niños se rascan con frecuencia la cabeza, especialmente detrás de la nuca y las orejas, debemos examinar con atención su cuero cabelludo para detectar la presencia de piojos o liendres. Estas últimas es fácil confundirlas con la caspa, pues los huevos de los piojos son blancos, pero se diferencian de esta en que son más difíciles de despegar del pelo. De hecho, para hacerlo lo mejor es utilizar una liendrera.
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¿Tiene piojos? Consejos para acabar con ellos
En el caso de detectar piojos en las cabezas de nuestros hijos, el fármaco más eficaz y que los pediatras recomiendan es la permetrina al 1 % en crema o loción. Esta se debe aplicar a modo champú siguiendo siempre las indicaciones del producto. Normalmente el tratamiento es efectivo al cabo de las 8-12 horas, pero puede que en ocasiones los piojos persistan. Tu pediatra es quien mejor considerará los tratamientos alternativos para eliminarlos, pero si ha llegado un punto en el que no sabes qué hacer y prefieres optar por los remedios caseros naturales, aquí te dejamos algunos de los más populares para intentar prevenirlos y eliminarlos:
1. Tras lavar la cabeza, podemos aclarar el pelo con una mezcla de agua tibia con vinagre blanco. Este remedio facilita que los piojos se despeguen.
2. Rociar vinagre blanco en la cabeza, cubrirlo con un gorro de ducha y dejar que actúe durante una hora. Después es necesario peinar el cabello con la lendrera los huevos del piojo.
3. Introducir lana entre las cerdas del peine podría ser útil para que los piojos se agarren al tejido. No obstante, es más cómodo y práctico utilizar una liendrera.
4. Utilizar un peine eléctrico varias veces al día.
5. Aplicar laca o gomina en el pelo de los niños para intentar prevenir el contagio de piojos y llevar el pelo recogido.
6. Cubrir el cuero cabelludo y el pelo con vaselina natural también puede ayudarnos a deshacernos de los piojos, puesto que al ser un producto oclusivo favorece la asfixia de los parásitos.
7. Evitar siempre el aire caliente de los secadores, ya que el calor favorece la permanencia de los piojos.
8. Otro truco que podría ayudarnos a prevenirlos es aplicar unas gotas de aceite de lavanda sobre la cabeza del niño y detrás de las orejas.
9. Masajear el cuero cabelludo con aceite vegetal (aceite de oliva o aceite de almendras suave). Cubrimos el cabello con un gorro de ducha o papel film y dejamos que el producto actúe durante algunas horas o toda la noche. A continuación, lavamos el pelo, lo desenredamos y lo peinamos.
10. El aceite del árbol del té también puede sernos útil en estos casos.
11. Aplicar crema suavizante (abundante) sobre el cabello del niño y dejar actuar durante un tiempo para que, a la hora de peinar con la liendrera, resulte más fácil hacer que los piojos se despeguen.
12. Sumergir la lendrera en un bol de agua caliente y bicarbonato para pasarla después por el cabello.
13. Podemos probar también con el tomillo fresco: lo hervimos y con el agua de la cocción frotamos el pelo de nuestro hijo.
14. Mezclar 10 gotas de aceite esencial de clavo en un bol con aceite de oliva. Masajeamos la cabeza del niño con la mezcla y la cubrimos con un gorro. Dejamos que el preparado actúe un par de horas y a continuación lavamos la cabeza con intensidad.
15. Lavar siempre el pelo con agua caliente.
16. Lavar la ropa de cama y los accesorios para el pelo con agua caliente.
Cómo último recurso, teñir el pelo con productos especializados para el cabello o con henna puede ayudar a eliminar los piojos, sin embargo hay que tener en cuenta que suponen una alternativa agresiva para el cabello de los niños, por lo que debemos evitarla. Asimismo, la AEP recuerda que los productos veterinarios antiparasitarios en ningún caso deberían ser usados ni en niños ni en adultos debido a los riesgos de seguridad que conllevan.
Recuerda que estos trucos antipiojos son simples remedios caseros, por lo que, aunque pueden ayudar a que los piojos de los peques desaparezcan, no garantizan su eliminación. Ante un caso de pediculosis de persistencia duradera, lo mejor es contar con la opinión de un especialista médico que escoja los tratamientos o medicamentos adecuados para cada caso.
Algunas curiosidades sobre los piojos que quizá no conocías
La AEP nos ayuda a desmontar algunos mitos acerca de los piojos y nos aporta información curiosa:
- La aparición de piojos no es más frecuente ni por la longitud del pelo ni por la frecuencia de uso de champús ni el tipo de peinado.
- Los piojos prefieren el pelo limpio al sucio y el liso al rizado.
- Hay más niñas que niños afectados dado el contacto más frecuente de cabeza a cabeza al realizar juegos más tranquilos.
- La edad de máxima afectación por pediculosis es de 3 a 10 años.
- En las personas afroamericanas hay menos infestación por piojos que en otros grupos étnicos debido a las diferencias de grosor del pelo y tipo de rizos.
- La transmisión de piojos se produce con mucha mayor frecuencia por el contacto directo de cabeza a cabeza y en menor medida por utilizar otros peines, gorros u objetos de uso personal.
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