Solemos pasar menos tiempo del que nos gustaría con nuestros pequeños. A causa del trabajo, las tareas, los recados y otros compromisos, pasamos mucho tiempo fuera de casa y a veces, durante la semana, parece imposible sacar un ratito para disfrutar del tiempo libre con nuestros hijos. Pero, ¿y si les animásemos a pasar un rato en la cocina con los adultos? La cena es para muchas familias el único momento en que todos se reúnen y pasan un rato juntos, así que ¿por qué no alargarlo y aprovechar también la labor de preparación? De esta manera, además de pasar un rato divertido juntos, aprovechamos para enseñar a nuestros pequeños a manejarse en la cocina, preparar recetas saludables y, así, conseguir que se acerquen poco a poco a los alimentos que no les gustan demasiado. ¿Os animáis?
Involucrar a los niños en las tareas del hogar es fundamental para inculcarles valores y enseñarles a ser responsables y, además, con ello consiguen desarrollar su destreza y coordinación. Así, si les animamos a participar también en la cocina, les ayudamos a que aprendan a valorar los alimentos y les enseñamos la importancia de llevar una dieta saludable.
Cuando se trata de cocinar, los niños tienen mucho que aprender: los nutrientes de los alimentos, las necesidades del cuerpo humano y lo importante que es no desperdiciar la comida. ¿Por qué no aprovechar el ratito que ocupamos preparando la cena para enseñarles todas estas cosas? Además, si algo hemos descubierto con Masterchef Junior es que los niños pueden disfrutar tanto como los mayores entre fogones y que su imaginación y creatividad son claves para crear nuevos platos y recetas.
Además de hacerlo entre semana para pasar un ratito con ellos, puedes hacerlo los fines de semana, ya que tenéis más tiempo para preparar recetas más elaboradas en las que los pequeños pueden colaborar todavía más. Y a ellos les encantará disfrutar de los platos que ellos mismos han preparado y poco a poco entenderán que deben ayudar en casa siempre que puedan.
Algunos tips para animar a los niños a cocinar
- Tómatelo como un juego. Recuerda que los niños no están demasiado familiarizados con algunos alimentos, y menos con la labor de cocinar. Por ello, procura no perder na paciencia y tener en mente que son niños y quieren jugar.
- Usad ropa vieja que no importe manchar. Esto lo hará todo más fácil y tu pequeño podrá explotar su imaginación y creatividad sin riesgos.
- Es preferible preparar recetas fáciles pero divertidas, para que tu pequeño no se aburra. Procura escoger aquellas que requieran manipular alimentos con las manos de manera que los niños pueden experimentar y aprender con ellos.
- Antes de empezar, asegúrate de que los niños entiendan que, aunque cocinar puede convertirse en un juego, la comida no es ningún juguete.
Prepara un postre saludable
Si hay algo que les encanta a los niños, son los dulces: el chocolate, los bizcochos, las natillas, los helados... Por eso, si quieres que empiecen a interesarse por la cocina, te animamos que les sugieran preparar un delicioso postre. Y aunque es importante que les inculquemos la importancia de llevar una dieta saludable, no tenemos por qué privarnos de algún que otro capricho de vez en cuando. Aun así, cuéntales que alimentos son más saludables, cuáles lo son menos y por qué, así como qué alternativas podemos utilizar para determinados ingredientes para preparar un plato más saludable.
Así, las harinas integrales, o la harina de maíz o de garbanzos pueden a las harinas blancas tradicionales; la mantequilla de cacahuete puede sustituir a la mantequilla tradicional; la miel o el azúcar moreno pueden sustituir al azúcar blanco; y podemos cambiar el chocolate con leche y el cacao en polvo por cacao negro puro. ¿Os gustan las natillas? Para prepararlas necesitas:
- 500 mil de leche semidesnatada
- 45 ml de nata ligera para cocinar
- 50 gr de chocolate negro de alto porcentaje de cacao en polvo
- 15 gr de miel
- Una cucharadita de esencia de vainilla
- 25 gr de maicena
- Una pizca de sal
Para empezar, mezcla el chocolate con la leche y remueve la mezcla con una espátula de varillas hasta que no queden grumos. Después, añade la miel, la maicena y la pizca de sal. Pon la mezcla en un cazo y remueve a fuego lento. Notarás que empiexa a espesar, entonces, añade la nata y la esencia de vainilla y sigue removiendo hasta qe todo esté completamente integrado. Poco a poco, ganará una textura gelatinosa. Retíralo del fugo, sírvelo en pequeños cuencos y deja que se enfríe.
Pizzas caseras muy divertidas
Las pizzas son, sin duda, una de las comidas que más disfrutan los pequeños. Enseñarles a prepararlas en casa con ingredientes saludables es una muy buena idea y, lo mejor de todo, es que ellos podrán decorarlas a su gusto, con personajes de sus dibujos preferidos, con colores o dibujando siluetas.
Geltina con sorpresa
A pesar de que no lo aparenta, la gelatina puede ser un alimento muy saludable e incluso está indicada en la dieta de muchos niños y ancianos. Se trata de un alimento de origen animal, ya que está elaborado a base de colágeno. ¿Quieres preparar tu propia gelatina en casa? Solo necesitas:
- 3 cucharadas de gelatina neutra
- 2 tazas de zumo fresco y natural de naranja, limón o fresa
- 1 taza de té de hierbas
- Miel
Para prepararla, debes mezclar la gelatina con el té ya preparado y remover hasta que se disuelva. Introduce esta mezcla en el recipiente donde quieras preparar el postre y, cuando esté fría, añade el zumo que hayas escogido y la miel para endulzar un poco el sabor. Para hacerlo más divertido, puedes introducir dentro algunos trozos de frutas o, incluso, alguna gominola. Cúbrelo con una tapa y conserva en el frigorífico hasta que esté lista para consumir.
Una deliciosa tarta de cumpleaños
Si quieres que su cumple sea todavía más especial, ¿qué te parece si es él mismo quien prepare su tarta? Podrá elegir el sabor que más le guste, el diseño y los ingredientes, y así presumir delante de sus amigos como el mejor cocinero de la casa. Si necesitas algunas ideas, te sugerimos que pruebes la tarta de tres chocolates: es muy sencilla de preparar y permite mucha decoración: lacasitos, chocolatinas, nata o, incluso, figuritas hechas de azúcar.
Sellos hechos de patata o boniato
Si planeas preparar tortilla de patata o hacer una receta con esta hortaliza, te sugerimos que animes a tu pequeño a participar. La patata es un alimento muy versátil con el que, además, los pequeños se pueden entretener jugando: pueden, por ejemplo, utilizar su imaginación cortarlas con distintas formas para decorar el plato e incluso hacer paisajes.
Las galletas siempre son un acierto
Enseñar a los pequeños a cocinar galletas puede ser muy divertido para toda la familia y las posibilidades son infinitas. Anímales a que participen no solo en el diseño de las formas y colores, sino que también aprendan las diferentes recetas que pueden hacer. Si os apetece, podéis organizar un pequeño concurso para decidir cuáles son las más originales.
Hamburguesas con forma de animales
¡Es hora de hacer hamburguesas! Pero, ¿por qué no innovar un poco con la forma? Las hamburguesas no tienen por qué ser redondas, puedes inventar nuevas formas, como por ejemplo, de distintos animales para que comerlas sea todavía más divertido. Cuando las preparéis, anima a los peques a que escojan qué ingredientes quieren incluir. Experimentar con distintos alimentos y sabores es muy beneficioso para ellos y les permite descubrir la multitud de posibilidades que hay en la cocina. Deja que hagan sus propias creaciones, ¿quién te dice que no vayan a ser grandes chefs en el futuro?
Sushi de pan de molde
Esta receta puede ser dulce o salada, a elección de los comensales. Se trata de preparar deliciosos rolitos elaborados con pan de molde que podrás rellenar con crema de cacao y avellanas, con queso de untar, con paté, con ensaladilla rusa o con cualquier cosa que se te ocurra, las posibilidades son infinitas. Solo tienes que untar las rebanadas de pan con el ingrediente que escojas, enrollarlo sobre sí mismo de forma que queden como rollitos y cortarlo de nuevo en rebanadas ovaladas, como si fuese sushi.
Tarta de cupcakes
Las recetas de postre, como decimos, son quizás las más atractivas para los niños. Así que, ¿por qué no explotar todo su potencial? Si os gusta el dulce, podéis preparar una divertida tarta de cupcakes. ¿Cómo? Solo tienes que elaborar varios cupcakes con los ingredientes que tú quieres, dejamos la receta a tu elección. Después, elegir la forma que quieres darle a tu tarta y formarla con los mismos cupcakes. Colócalos sobre una bandeja para tener espacio suficiente. A continuación, puedes decorar el conjunto como tú quieras y podrás hacer diseños muy elaborados.
Un chef, un restaurante y varios clientes
Para disfrutar juntos aún más de la comida juntos y la tarea de cocinar, te sugerimos que organicéis en familia un pequeño teatro. El peque puede ser el chef y vosotros los clientes que acudís a su restaurante. Allí, os servirá su receta más especial y vosotros, como clientes, tendréis que darle vuestra valoración. Así podrás animarle a que expliqué qué ingredientes ha utilizado para la receta y por qué, cómo ha ideado el plato y por qué es su favorito. Disfrutará mucho de este juego y quizás le ayudes a descubrir su vocación.
¿Habéis jugado alguna vez a alguno de estos juegos? No importa la receta que preparéis. Podrás hacer un pastel, pizzas, hamburguesas, preparar cenas, comidas, postres, galletas para acompañar el café o un delicioso plato de sushi. Lo más importante es que animes a los niños a cocinar y a participar en estos juegos.
No es necesario que vayáis a ningún restaurante donde disfrutar de platos exquisitos para pasar un buen rato en familia. Será suficiente con que todos participéis en la elaboración de algún plato que todos escojáis juntos. Puede que al principio no les entusiasme la idea, pero te aseguramos que les encantará poder disfruta de las recetas que ellos mismos han preparado y, sobre todo, pasar más tiempo con papá y mamá.
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