Charlie Beswick es una joven inglesa madre de dos niños. Uno de ellos, Harry, padece el síndrome de Goldenhar, una extraña enfermedad que hace que el pequeño no tenga ojo ni oído en el lado izquierdo de la cara. Además, su mandíbula tiene también una malformación que le impide hablar con normalidad.
Al margen de su enfermedad, Harry tiene el cariño de su madre y su hermano y desarrolla su vida con una prótesis en su ojo izquierdo y un audífono que le permite escuchar. Como muestra de esa vida feliz a pesar de los obstáculos, la madre de Harry subió a su cuenta de Instagram una bonita fotografía con su hijo. Sin embargo, un usuario de esta red social decidió denunciar la imagen por creer que incumplía los términos de uso de la app y sí, Instagram acabó retirando esta imagen en la que la madre bromeaba con su hijo sobre la ausencia de su ojo.
Tras la censura de su foto, la madre decidió volver a postear la misma imagen y esta vez escribió: 'A la persona que denunció la foto de mi hijo: ésta es su cara. Si no te gusta, sigue tu camino.'
Por segunda vez, su post fue eliminado de Instagram y, por ello, la madre volvió a publicar otra imagen en la que añadía este texto: "¿Qué ves cuando miras a mi hijo? Por desgracia, como temía, una imagen de Harry sin su prótesis ocular ha sido censurada por Instagram dos veces. Estoy muy conmovida por todo el apoyo que he recibido en Twitter de gente que, además, pedía explicaciones a Instagram. Ahora han vuelto a publicar mi post. No quiero ninguna explicación o excusa. Me alegro de que las fotos de mi hijo haya vuelto a donde estaban pero todavía pienso que estas "reglas de uso" tienen que ser cambiadas. La gente debe verle la cara a la enfermedad. Se lo agradezco mucho a todos aquellos que nos apoyan."
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