1. Siempre tienen que ir al baño
Es automático. A los cinco minutos de haber comenzado el viaje al niño le entran ganas de ir al baño, ¿no ha podido avisar antes de ponernos en marcha? No te preocupes porque esto pasa en las mejores casas, como estas imágenes que muestran a "mamás reales" en situaciones cotidianas con sus hijos, ¿te suena de
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2. El ansia viva se apodera de él
Una de las frases favoritas de los niños durante el viaje es: ¿Todavía vamos por aquí? ¡Algo que te pone de los nervios, totalmente!
3. Solo quieren escuchar Frozen (en bucle)
Esto es así, y es que quien decide qué música hay que poner durante el viaje son ellos. Ya sea porque así van contentos y no empiezan a discutir entre ellos, porque se relajan, se entretienen, van distraídos... son razones de peso para sacrificarnos. ¿Pero qué es lo peor de todo? ¡Que no se cansan de escucharla nunca!
4. Quiere algo que está en el maletero
Otra de las cosas que nunca fallaes: "¿Mamá, dónde está el juego de Pepa Pig?" y efectivamente, tú contestas: "En la maleta" (que está en el maletero). "Jooo, ¡pues lo quería para jugar en el viaje! Y, ¿ahora qué hago?. Mamá para y lo cogemos, por fi, por fi, por fi...".
5. Siempre se le olvida algo
"Hijo, dame el cargador del móvil para el coche que lo tengo que poner a cargar", y él contesta con cara de no haber roto nunca un plato: "Uy, se me ha olvidado cogerlo"... Para una cosa que le dijiste que cogiera ¡se le ha olvidado!
6. "Hacer caras" a otros conductores
Llega un momento del viaje en el que los niños ya no saben ni qué hacer... Pues bien, ese suele ser el momento en el que empiezan a hacer "el payaso" y ¿cuál es su juego preferido? Pegar su cara al cristal y empezar a poner caras feas a todos los conductores con los que te cruzas... ¡Qué cruz! Pero, ¡lo peor es cuando lo hacen en un atasco!
7. Tiene hambre/sed/malestar (o todo a la vez)
Siempre que viajamos con niños las tres cosas que siempre les pasan son: tienen hambre (y no has cogido nada para comer en el viaje), tiene sed (y se te ha olvidado la botella de agua en la cafetería de la vía de servicio cuando habéis parado a echar gasolina) o se marea... Lo cual es más grave ya que si le da por vomitar ¡no hay vuelta atrás!
8. No para un minuto quieto
Un niño que vaya todo el camino sentadito y sin dar guerra es prácticamente imposible, ¡es como una lotería! Lo normal es que no pare de quitarse y ponerse el cinturón, subir y bajar las ventanas, buscar la postura para dormir... ¡Paciencia!
9. Se aburre
Otra de las frases preferidas de los peques durante un viaje es: "Me aburro" y por supuesto el: "¿Cuánto queda?". Para esos momentos ten previstos juegos con los que distraerle o ¡vuélvele a poner en bucle la canción de Frozen!
Aquí tienes algunas canciones de toda la vida que seguro que te sabes para cantarlas junto a tus hijos durante el viaje y que así se les haga más corto.
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10. Se duerme cuando por fin habéis llegado a vuestro destino
Cuando ya estáis a menos de 10 km para llegar a vuestro destino es precisamente cuando el peque está sumido en un profundo y relajado sueño. Y piensas: "¿En serio?" Pero esa carita de angelito que pone cuando está dormido te ablanda el corazón y se te olvida el resto del (horrible) viaje que te ha dado.
No te preocupes, ¡nos pasa todas!
Esta podría ser la imagen perfecta para resumir cómo es un viaje con tus hijos en coche. Pero no te preocupes, no vas a parecer una loca ni una desquiciada porque... ¡nos pasa exactamente igual a todas! ¡Feliz viaje!
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