¡Generalmente, se tiende a bañar demasiado a los bebés, lo que podría acabar dañando su piel. Aunque hay muy diversas opiniones al respecto, hay quienes opinan que durante las primeras semanas de vida es suficiente con lavar a nuestro bebé con una esponja húmeda, siempre y cuando lo mantengamos limpio y sin gérmenes con los cambios de pañal. Por otro lado, hay quienes consideran que bañarlo a diario es lo más adecuado, ya que es un momento de comunión con nuestro hijo que nos ayuda a crear un vínculo especial con él.
Ten en cuenta, además, que siempre que lo baes debes tomar ciertas precauciones. En primer lugar, la temperatura del agua debe ser de entre 32 y 38 grados, así como la de la habitación, que debe estar adecuadamente acondicionada para que la temperatura sea cálida.
¿Puedo bañarme con él?
Cuando te bañes con él, reserva un rato largo: son preferibles los baños largos y menos frecuentes que hacer uno breve a diario. Sin embargo, solo debes hacer esto cuando sea un poco más mayor. Durante los primeros meses, es seguro que utilices una bañera en la que esté cómodo y no se resvale.
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Después del baño, procura colocar cerca de la zona de baño todo lo que necesitas, como la toalla, la ropita y las cremas. Asegúrate de secarle bien, con delicadeza, y presta especial a las zonas más delicadas, como el culito.
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¿Qué hacer si tiene miedo al agua?
A algunos bebés les encanta el agua, pero otros son más temerosos. Lo normal es que se sientan cómodas en la bañera, ya que la sensación de estar sumergido en agua les es familiar después de haber estado nueve meses en el líquido amniótico de nuestra barriguita. Pasa, sin embargo, que algunos se bloquean durante las primeras semanas.
Puede bastar con una sola mala experiencia (agua demasiado caliente o demasiado fría, jabón en los ojos) para que el bebé asocie el agua con un recuerdo desagradable. El rechazo del bebé también puede nacer de un sentimiento de inseguridad. Por eso, es primordial hacer movimientos firmes y seguros y tener confianza en ti misma para que el bebé se sienta sujeto. Para ayudar a tu pequeño a acostumbrarse, puedes empezar con baños cortos de 5 minutos e ir prolongándolos poco a poco.
Antes de empezar
1. Precalienta la habitación. La temperatura ideal es de 22 o 23 grados. Llena un poco la bañera antes de meter al bebé para evitar que se quede frío. El agua debe estar alrededor de los 36 o 37 grados. Compruébalo con un termómetro o con tu codo. (Comprar termómetro de baño de bebé por 14,99€)
2. Pequeño detalle práctico. Si el cambiador no tiene bañera integrado, procura tener a mano una toalla gruesa o una superficie acolchada sobre la que secar a tu bebé.
3. ¿Qué necesitas? Debes tener todo a tu disposición en el momento en que el bebé está en la bañera. Puedesr prepara una pequeña cesta con jabón, champú, toallas, ropa de recambioy pañales limpios. Tampoco debes olvidar de poner juguetes adaptados al agua para que pueda disfrutar de un momento de placer durante el baño y lo asocie a algo divertido. (Comprar juguetes de baño en Amazon por 12,99€)
¿Qué jabón debo escoger?
Es fundamental que el gel de baño que utilices sea 'sin lágrimas', ya que, como te hemos dicho, una mala experiencia puede ser clave para qur tu pequeño le coja miedo a los baños. Este tipo de geles, además, son hipoalergénicos y cuidadosos con la piel sensible de los bebés. Este gel de baño Chicco Natural Sensation, por ejemplo, está enriquecido con aloe vera y camomila para hidratar y aliviar las posibles rozaduras del pañal. Además, no contiene paravenos, colorantes ni jabón.
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¿Cómo disfrutar del baño perfecto?
- En primer lugar, informa al bebé de que ha llegado la hora del baño. Poco a poco, ve explicándole con tu voz y con tus gestos lo que vas a hacer.
- Puedes enjabonarlo sobre el cambiador o directamente en el agua. Al desvestirlo y enjabonarlo, mantén bien el contacto con el bebé para que se sienta tranquilo: ponle una mano sobre el vientre, acaríciale la frente... Es preferible no utilizar esponjas, ya que se pueden acumular microbios. Hasta los 3 o 4 meses, lávale bien todos los pliegues de la piel y la cabeza, ya que con ese tiempo los bebés sudan mucho.
- Evita mojarle la cara. Para lavarle el pelo, antes que mojarle la cara, que le puede asustar, pasa la mano sobre su cabecita echándole el agua hacia atrás. Reserva el lavado de la cara para más tarde.
- Tus movimientos deben ser suaves, pero seguros. Esto ayudará a que tu niño sienta confianza. Recuerda sostenerle siempre por la nuca, con el brazo izquierdo si eres diestra y con el derecho si eres zurda.
Después del baño
- Pon especial atención al secado. Debes secr todo su cuerpo con toquecitos suaves con la toalla. También puedes optar por un albornoz con capucha que lo resguarde del frío y proteja su cabecita. (Comprar albornoz de bebé con capucha en Amazon por 8,99€)
- Y si el baño está lo suficientemente caliente, puedes darle un masaje con aceite de bebé sin perfume o una crema hidratante. (Comprar aceite de bebé para después de la ducha en Amazon por 6,58€)
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