Sin duda eres una buena amiga, una buena trabajadora y muy meticulosa con todo lo que haces, sin embargo, ese afán por que todo sea totalmente armónico, puede llega a ser excesivo para la gente que te rodea. Vives bajo tu propia presión, y nunca te das ni un respiro. Tranquila, no eres la única virgo, ¿quieres conocer a alguno más?
1. Siempre dispuesta a ayudar
Al ser una persona tan organizada, siempre tienes tiempo y consejos para los demás. No dudas ni un segundo en darlo todo de ti en cualquier momento, para hacer feliz a la gente. Si puedes ordenar tu vida ¿por qué no ordenar la de los demás? El efecto Monica Geller se apodera de ti a la menor ocasión.
2. Siempre logras que todo cambie a tu favor
Chica, eso es un don. Cuando todo parece perdido, y todos los dedos te señalan a ti, consigues salir airosa. Eres una persona observadora y tu mente es analítica, así que desmenuzas cada ocasión y sabes cómo jugar tus cartas para que las cosas se desenvuelvan como mejor te venga a ti. Sin lugar a dudas, éste es tu mejor talento.
3. Un don para la videncia
Ser tan observadora tiene más de un beneficio. Después de haber contemplado cómo se rompían los corazones de tus amigas, en qué zona del metro se coloca todo el mundo o cuándo dejar de batir las claras de huevo... ¡ Te has sacado el carnet de vidente con honores! Sabes por dónde van los tiros y calas a las personas con simple un apretón de manos. No hay nada que escape a tu don para la adivinación.
4. Si dices que estarás ahí, estarás ahí
Eres muy buena amiga, y además odias decepcionar a la gente. Tus amigos saben que pueden contar contigo para cualquier cosa, desde la fiesta más exclusiva del mundo hasta la típica cena de parejas en la que te endosan al amigo soltero de turno. Siempre estás lista con tu kit de pijama-helado-peli para consolar a una amiga.
5. Adoras los detalles
Es tu kryptonita. Prestar demasiada atención a los detalles e intentar que todo sea perfecto, puede ser algo maravilloso para el trabajo o el orden en tu casa, pero también te puede llevar a volverte loca. A veces el desorden no es tan malo, y todo el mundo sabe que cometer errores forma parte del aprendizaje. Relájate, respira, y deja que entre en tu vida un porquito de caos. Ta vendrá bien.
6. Eres muy dura contigo misma
Exigencia es tu segundo nombre, y por supuesto, la primera a la que sometes a tu vara de medir, es a ti misma. Al ser una persona tan perfeccionista, nunca nada queda como te gustaría. Si invitas a alguien a cenar, tú misma te boicoteas diciendo que el pollo está seco, el vino es barato, y que la casa está hecha un desastre. Los que mejor te conocen saben que no puedes evitarlo. Como consecuencia, tu autoestima siempre está por los suelos.
7. La preocupación siempre te acompaña
Vives con estrés las 24 horas del día. Por supuesto, la presión te la impones tú misma. Una simple mirada puede hacer que te pases el día dándole vueltas a la cabeza sobre lo que has podido hacer. Es fácil que estés llena de remordimientos, y pensando cómo solucionarlo todo.
8. Siempre eres la mejor opción que contratar
Recuerda el currículum de Barney Stinson. ¿Quien no contrataría a alguien que llega el primero y se va el último? Eres capaz de organizar la administración de una empresa, organizar las agendas y adelantar las tareas sin a penas haber hecho la pausa para el café.
9. Un futuro prometedor
Todas tus cualidades sirven para ponerte la alfombra roja al éxito. Eres analítica, observas meticulosamente, estás atenta a todos los detalles, por pequeños que sean, y estás constantemente aprendiendo. Tu trabajo duro siempre se ve recompensado, y asciendes a una velocidad pasmosa. Eres imparable.
10. Eres una hormiguita
En el cuento nunca has sido la cigarra. Llevas tus cuentas perfectamente organizadas y al día. Sabes cuándo puedes gastar y cuándo no. Si fueras banquera, sin duda la crisis nunca habría llegado.
11. Sigues buscando al príncipe azul
Te cuesta admitirlo, al menos con estas palabras, pero aún buscas algo más maravilloso que lo que ya tienes. Tu perfeccionismo hace que esperes que aparezca esa persona ideal para ti, que cumpla con todas tus exigencias, comparta tus mismos gustos, y a poder ser, que viva en un castillo. Pedirle a la vida más, no tiene nada de malo. Conformarse no está permitido, pero hay un problema con los sueños, y es que no tienen fallos. Echa un vistazo a tu alrededor y a lo mejor te das cuenta de que hay algo realmente bueno para ti, a la vuelta de la esquina.
LETTER
Y además:
10 signos de que eres Leo
10 características que demuestran que eres Cáncer