¿Qué mejor manera de alegrar tu día a día que darle un toque de humor con un bolso original y de una forma que solo con verla te haga sonreír? Sí, los bolsos con formas extravagantes llegaron para quedarse oficialmente desde que Chanel sacó su colección de bolsos que imitaba a casi cualquier objeto que puedas imaginarte. Lo cierto es que, hay que admitirlo, los hay para todos los gustos.
De colores vivos, pastel, con efecto tornasolado o metalizado, con purpurina... Las opciones son muchas y de lo más variadas. Tanto si ya te has hecho con uno de estos accesorios, básicos tan imprescindibles en tu armario , como si no, y no sabes bien cómo lo puedes combinar, te damos algunas pautas.
¿Cómo elegirlo?
Vamos a empezar por el principio, es decir, por qué hemos de tener en cuenta a la hora de decantarnos por un bolso entre los cientos de modelos que hay. Por supuesto, lo primero será definir nuestro presupuesto y, a partir de ahí, mirar aquellos bolsos que se ajusten a lo que queremos pagar por ellos. En segundo lugar, conocernos a nosotras mismas y saber qué es lo que nos vamos a atrever a ponernos y qué no. Porque, seamos sinceras, hay cosas que jamás nos pondríamos y, a no ser que lo que queramos sea que el bolso termine en el cajón de los recuerdos, más vale escoger uno que realmente vayamos a utilizar. Por último, no importa tanto el modelo en sí (es un bolso capricho, todo el mundo lo sabe) como nuestro talento a la hora de combinarlo y saber sacarle partido.
Recuerda que esta clase de bolsos están diseñados para destacar y ser el centro de todas las miradas. Si no crees que vayas a saber llevarlo como se merece, mejor escoge uno que te sea fácil de combinar y ya irás cogiendo práctica poco a poco. ¡La creatividad también se entrena y cada vez te volverás más atrevida en tus looks!
¿Cómo combinarlo?
Si eres principiante en esto de combinar un bolso tan original como los que te proponemos, ten siempre en cuenta que lo más sencillo y que tiene poco margen de error son aquellos outfits en los que priman los colores más básicos o los que están compuesto por una sola gama cromática. En ambos casos, el resultado es el mismo: la nota diferente la pone el bolso.
Otra opción con la que ir sobre seguro es escoger prendas en tonos similares a los colores del bolso, manteniendo de esta forma la gama cromática, pero sin restarle protagonismo. Así se consigue un look perfectamente coordinado y armónico, con un accesorio que es rompedor, pero no desentona.
Para las fashionistas de nivel avanzado o, simplemente, para las más atrevidas, las opciones son tan infinitas y variadas como la imaginación. La única premisa que hay que intentar respetar es la de conseguir el equilibrio y la armonía entre todos los elementos que componen el look. Podemos introducir colores vivos, estampados e, incluso, otros accesorios además del bolso que destaquen, pero para ir impecables y poco recargadas, todo tiene que estar en sintonía y justificado.
¿Cuándo ponértelo?
¡En cualquier ocasión! La ventaja que tienen estos bolsos es que como su función es casi meramente estética, lo mismo te vale para salir por ahí con tus amigas una tarde que para darle un toque gracioso a un look más de noche. Por supuesto, dentro de esta gama de bolsos tan divertidos también se puede hacer una clasificación entre los más serios y los más frívolos. Céntrate en qué quieres transmitir y el dress code del evento o compromiso que tengas.
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